Ventas ocupan vías pese a prohibición en Sonsonate

 Argumentan que en la Mega Plaza no obtienen las ganancias esperadas, aunque otros comerciantes aseguran lo contrario. Alcalde pide a la población comprar en dichas instalaciones

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31 January 2016

Vendedores informales insisten en ocupar las calles de Sonsonate para ofrecer sus productos, como verduras, artículos de la canasta básica, y ropa, a pesar de que la alcaldía inauguró hace tres años la Mega Plaza, un proyecto cuya inversión ascendió a $12, 400,000.

El vendedor de plástico para forrar cuadernos, José Serrano, argumentó que en el lugar, ubicado en el barrio Veracruz, no venden y que las ganancias son mejores en la calle.

“Las ganancias han bajado en un 50% o 60%”, consideró el hombre, que se instala en las proximidades del parque Rafael Campo para ofrecer el producto.

Los vendedores también se instalan en las calles que conducen hacia las terminales de la localidad y a San Antonio del Monte.

La construcción de la Mega Plaza permitió liberar 43 calles sonsonatecas de vendedores informales, los cuales habían construido infraestructuras de lámina y madera que impidieron, por décadas, que los vehículos transitaran por estas.

La vendedora de pomadas, Jeanette Rodríguez, expresó que ocupan las calles porque necesitan obtener ganancias para el sustento de sus hijos y el pago de algunos compromisos, como el alquiler de casas.

Algunos confirmaron que hay quienes cuentan con un local en la infraestructura; pero continúan en las calles para ofrecer sus productos.

Prohibición

Esto a pesar que existe la ordenanza contravencional para la convivencia y seguridad ciudadana y contravenciones administrativas del municipio de Sonsonate,  en vigencia desde el 21 de enero de 2013 y que prohibe el comercio de productos a través de ventas ambulantes y el uso de espacio público para el mismo fin.

El Cuerpo de Agentes Municipales (CAM) realizó el año pasado 1,506 decomisos, principalmente de ropa y verdura. Algunas de estas acciones terminaron en enfrentamientos entre los agentes y vendedores.

Pero mientras estos últimos se quejan de no usar la Mega Plaza, con el argumento que no obtienen las mismas ganancias, algunos de los que sí han aceptado quedarse opinan lo contrario.

La vendedora de pollo, Milagro de Castañeda, de 59 años, señaló que entre las ventajas que tiene el lugar es que está techado por lo que ya no deben de soportar lluvia, sol y la humareda de los buses, como cuando se ubicaban en las calles.

“Uno en la calle aguanta de todo; pero aquí gracias a Dios en lo personal estoy bien. Las ventas es una cosa que no me puedo lamentar, han sido iguales o a veces mejores, estoy conforme”, dijo la fémina, quien durante 30 años vendió en las calles.

Otra de las ventajas que señaló es que no tiene que gastar en el pago de bodega para guardar la mercadería.

Otros vendedores señalaron que quienes están en la calle “son rebeldes y no les gusta estar bien, quieren andar en la calle aguantando las inclemencias (del tiempo)”.

El alcalde de Sonsonate, Roberto Aquino, señaló que los vendedores que se mantienen en las calles no son del municipio; sino que llegan de lugares cercanos, como Nahuizalco, Izalco, y San Antonio del Monte.

No existe un registro exacto de cuántos vendedores informales se mantienen en la calle, ya que es variable la presencia de estos.

El edil expresó que continuarán buscando que las calles estén despejadas, pero que ha dado instrucciones al CAM para que no exista agresión en los procedimientos.

Además hizo un llamado a la población para que compre en la Mega Plaza, como un acto de reciprocidad hacia los vendedores que liberaron las calles de Sonsonate y optaron por trasladarse a dicha infraestructura.

El representante de uno de los negocios formales que se encuentran cerca de Catedral, señaló que haber liberado las calles de las infraestructuras es una ventaja para ellos, pues estos ya no están escondidos como ocurrió hasta antes de 2013, cuando se inauguró la Mega Plaza.