La segunda caravana de migrantes salvadoreños pasó su segunda noche en México en el parque de la localidad de Metapa, en el estado sureño de Chiapas. Llegaron ahí el sábado para recuperar fuerzas. Algunos, los que viajan con niños y ancianos, fueron acogidos por familias mexicanas, que abrieron las puertas de sus casas para que los salvadoreños se protegieran.
Muchos recuerdan que hubo rezagados al cruzar el río Suchiate y, al no verlos en el parque, se preguntan si “cayeron”, detenidos por la policía mexicana. Desconocen que, en realidad, fueron decenas de salvadoreños – 81 en total – los capturados por las autoridades de migración en México, durante el cruce del Suchiate, y que ya fueron deportados, de vuelta a El Salvador.
“Ahí andaban diciendo que como unas treinta personas se cruzaron el río de último y adelante ya los estaban esperando los de migración”, relata Eduardo López, que pasó la noche en una de las aceras del parque en Metapa.