El presidente estadounidense, Donald Trump, instó este jueves a la caravana de migrantes, en su mayoría hondureños, que se dirige a EE.UU. que se “den la vuelta” y “regresen a su país”, ya que no va permitir la entrada de gente “ilegalmente”.
“A aquellos en la Caravana, den la vuelta, no vamos a dejar que entren personas ilegalmente en EE.UU.”, sostuvo Trump en un mensaje en su cuenta de Twitter.
“¡Vuelvan a su País y si quieren, soliciten la ciudadanía como otros millones están haciendo!”, agregó.
La caravana, que partió el 13 de octubre de San Pedro Sula, Honduras, está compuesta por más de 7,000 personas y se encuentra actualmente en el estado mexicano suroriental de Chiapas.
Trump amenazó la semana pasada con “cerrar” militarmente la frontera con México, en la que ya hay desplegados unos 2,200 miembros de la Guardia Nacional, pero no dio detalles sobre cómo pretende blindar un límite de más de 3,200 kilómetros, que incluyen parte del Río Bravo.
En este sentido, se conoció ayer que el Pentágono tiene intención de ordenar el envío de 800 militares más al sur del país para ayudar en labores de seguridad fronteriza, informaron medios de comunicación.
En la actualidad, según las últimas cifras difundidas por el Departamento de Defensa a finales de agosto, unos 2,200 efectivos permanecen en la zona, principalmente en el estado de Texas, implicados en labores de apoyo a la seguridad fronteriza.
Sin embargo, el gobierno de Honduras informó que la caravana ya comienza a desintegrarse pues muchos hondureños han vuelto de regreso a su país (ver nota en siguiente página).
La mayoría de quienes han regresado lo han hecho por el cansancio o las dolencias que comenzaban a padecer después de enfrentarse a las duras condiciones de la ruta del migrante a lo largo de Guatemala y el sur de México.
Honduras asegura que los migrantes han sido manipulados por la izquierda.