La División Central de Investigaciones de la Policía Nacional Civil perdió ayer a uno de sus mejores investigadores. El cabo Carlos Alberto Medina murió al intentar repeler un asalto en el interior de un bus de la Ruta 117, que hace su recorrido entre Aguilares y San Salvador.
El hecho ocurrió en el kilómetro 22 y medio en el municipio de Guazapa, donde también murió un vigilante, un delincuente y dos pasajeros más resultaron lesionados en las piernas.
Medina, como respetuosamente le llamaban sus compañeros, era un policía de carrera con más de 20 años de servicio.
Inició como agente de seguridad pública y estuvo ahí por varios años y luego se especializó en tareas de investigación donde, en pocos meses, sobresalió en sus casos.
“Era muy ordenado en su trabajo y muy inteligente, por eso los jefes policiales le encomendaron misiones y casos muy complejos”, expresó un compañero de la víctima.
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En ese hecho, registrado en la colonia Jardín de Mejicanos, murieron 17 personas y 15 más resultaron lesionadas.
Medina resolvió el complejo caso con un equipo de investigadores en pocos meses. El caso tuvo una investigación muy sustentada y por eso los jueces condenaron a uno de los asesinos a más de 400 años de cárcel. Otros pandilleros fueron sentenciados a 66 años de cárcel.
Horas después del hecho, otros investigadores y compañeros de trabajo expresaron que Medina también indagó el homicidio del periodista y documentalista franco-español Christian Poveda, quien fue asesinado en septiembre de 2009 en la calle antigua a Tonacatepeque, en Soyapango.
El detective Medina también logró penetrar a una de las más fuertes estructuras de la pandilla 18 y realizó la captura de los asesinos del periodista.
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“Se nos fue uno de los mejores, una joya para la institución policial, un hombre de familia y un investigador muy inteligente, era admirable su capacidad de trabajo y, sobre todo, era muy responsable y disciplinado”, declaró uno de sus compañeros que prefirió omitir su nombre por seguridad.
Medina, además, investigó la “Banda de los Embolsados”, una estructura de la Mara Salvatrucha que asesinaba a sus víctimas y las abandonaba en las principales carreteras del país hace más de diez años.
También, estuvo asignado a indagar decenas de masacres y procedimientos de extorsiones y bandas de robo de vehículos.
Recibió decenas de cursos de investigación en la Academia de la Policía y capacitaciones de casos de homicidios y en otras áreas por policías de otros países.
Lamento de uno de sus jefes
La muerte del cabo Medina fue sentida por decenas de policías de la División de Investigaciones, entre ellos el director de Centros Penales, Marco Tulio Lima, otrora, jefe de Investigaciones de la Policía Nacional Civil y División Antinarcóticos.
“El cabo Carlos Alberto Medina, caído esta mañana, era un excelente investigador, quien esclareció cientos de casos (y) dentro de ellos los más complejos, como la quema de microbús en Mejicanos, sin duda una gran pérdida... honor y gloria a su memoria”, expresó Lima en su cuenta de Twitter.
Lamento el asesinato de el Cabo Carlos Alberto Medina, caído esta mañana un excelente investigador quien esclareció cientos de casos dentro de ellos los más complejos como la quema de microbús en mejicanos, sin duda una gran perdida...honor y gloria a su memoria pic.twitter.com/kHjRATSPb4
— Marco Tulio Lima M (@marcotlimam) October 5, 2018
El agente se convirtió en la segundo policía muerto en menos de una semana, según los registros oficiales.
El pasado sábado el agente Jesús Antonio López fue atacado por una media docena de pandilleros cuando se dirigía al cantón Nance Verde, en Candelaria, Cuscatlán. Fue lesionado y murió en el hospital.