Que las distancias se han recortado... sí, pero porque El Salvador ha retrocedido. Ante Montserrat, la Selecta sufrió de lo lindo, pudo hasta perder el juego, y lo terminó ganando en el 90+4’ gracias a Óscar Cerén.
Ante un equipo que no jugaba desde hace tres años, de una isla a donde lo que gustan es el cricket, con poco más de cinco mil personas, lo que el equipo de Carlos De los Cobos hizo fue pobre. Si bien tuvo la mayor posesión del balón, por mucho (75 por 25), el equipo padecía una transición más lenta que en la Liga Mayor, y Montserrat, con un poquito de orden, evitaba que la Selecta llegara con claridad, sobre todo en los primeros 30.
Y después, cuando generaron a partir de la misma fórmula, pelotazo de Barahona a las espaldas de los centrales para Cerén o Tamacas, muchas acciones no supieron concretarlas, por lentitud en los remates, o por la mala puntería.
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Hasta 25 remates hizo el equipo nacional, pero, de esos, sólo 10 fueron al arco. Sin embargo, le costaba mucho al equipo nacional, carecía de sorpresa, de variantes, de conjunción en la zona buena. Y Dennis Pineda, el más habilidoso, simplemente no se juntaba con nadie.
Tuvo que aparecer Óscar Cerén para rescatar los papeles de la Selección, pero no la imagen, que rozó lo lamentable por el tipo de rival. Así como sería sorpresa que Brasil no ganara por un, por ejemplo, 3-0 en el amistoso próximo, también lo era que no pudieran perforar el arco de Brooks.
De hecho, en los primeros minutos, fue mejor el local al menos en fútbol efectivo, ya que las pocas veces que encimó, llevó peligro. Al 16’, Clifton, de volea, casi anota, pero el meta Hernández desvió a tiro de esquina. Y al 20’, el arquero cortó una combinación peligrosa de Clifton para Mason, quien buscó el centro de la muerte con Comely en el área. Luego, sobre el 25’, probó Woods con un remate desviado.
Baldazo
Fue del 28’ en adelante que mejoró un poco la selección, que probó por fin con cierta claridad. Pineda tuvo una bola frontal, y la tiró arriba, y Barahona le mandó un balón profundo a Díaz, quien la bajó con el pecho y la tiró arriba, en la más clara del juego hasta entonces. Luego, en otra acción, Coca filtró para Tamacas, y este centro para el único centrodelantero, que la voló de nuevo.
Pero al 38’, El Salvador recibió un baldazo de agua fría. Luego que el travesaño salvó un cabezazo, la bola le quedó a Woods, quien centró hacia atrás para que Joseph Taylor la mandara al fondo ante la defensa pasiva de los de la azul y blanco. 1-0.
Sobre el tramo final, Barahona se juntó con Cerén, y este se la bajó a Tamacas, pero en el último segundo, le desviaron el tiro. Mucho esperó. Y al minuto, lo mismo con Baires.
Para la segunda mitad, la tónica era similar. La bola la tenía El Salvador, pero la transición era lentísima, y la única fórmula era filtrar balones al costado derecho, por el flanco de Dyer.
Cerén probó con un remate desviado al 48’, y al 52’ se lo tapó Brooks. Poco después, él mismo le filtró un balón a Pineda, quien remató por fuera. El Salvador seguía llegando, pero le faltaba generar de verdad.
Hasta que al 62’, Alfaro encontró a Cerén por derecha, quien, con un leve amague, se quitó a Dyer, enfiló al área y sacó un potente derechazo para el empate.
Siguió llegando la selección, y se lo perdió Tamacas al 72’, tras un balón filtrado de Barahona, y al 74’, no encontró receptor su centro dentro del área. Sobre el 79’, Braham salvó en una barrida ante el remate tardío de Baires. Era ataque contra defensa, pero en el 90’, en una contra, tuvo la victoria Montserrat con Clifton, pero salvó Mendoza al barrer.
Ya en el descuento, el meta Brooks le sacó un remate a Cerén. El Salvador siguió ensayando, a ratos incluso de manera lenta, pero no renunció al ataque. Y en el minuto 94’, se escapó por izquierda Alas y centró al corazón del área, a donde Cerén se lanzó de cabeza para salvar los papeles de la Selecta y evitar un oso en la Liga de Naciones, a donde, quizás no se iba a gestar un oso, quizás es sólo la realidad a donde estamos parados, a ese nivel.