El Sindicato de Trabajadores de la Asamblea Legislativa (Sitral) cerró este lunes el acceso a los empleados y a los diputados en demanda de la suspensión de despidos de empleados de ese órgano del Estado.
Esta acción provocó que el presidente de la Asamblea, Norman Quijano, se reuniera de emergencia con los miembros del sindicato a quienes explicó la delicada situación en que se encuentran las finanzas del Congreso.
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Quijano dijo que llegaron a un acuerdo y se comprometió a tres puntos: no despedir empleados que gozan de fuero sindical, a trabajadores con discapacidad, ni a mujeres embarazadas y en estado de lactancia.
Luis Ortega, presidente del sindicato, sostuvo que están en contra de las plazas fantasmas en la Asamblea, pero criticó que se estuvieran haciendo despidos de empleados que sí cumplen con su labor.
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La Asamblea atraviesa un déficit presupuestario en el rubro de pago de salarios que, si no subsana tiempo, podría provocar impagos de servicios y bienes, según han explicado legisladores de varias bancadas.
Al filo de las 12:00 del mediodía los empleados y diputados pudieron ingresar el primer Órgano del Estado con normalidad.