Aunque fue el 5 de junio, no quiero dejar de referirme a “Nuestro Medio ambiente y cómo afecta a nuestro organismo”…
Las bolsas y botellas de plástico se pueden recoger y reciclar… Hay muchas posibilidades de reciclar el plástico, pero se requiere la voluntad de recogerlo para reciclarlo y la innovación empresarial para fabricar productos útiles. En Perú, de las botellas de plástico que recolectan en campañas de limpieza, fabrican las “Ponchilas”… Una mochila que incorpora un poncho para que los niños de los pueblos en las alturas de los Andes, puedan ir a la escuela cuando bajan las temperaturas. De 80 botellas se produce una Ponchila.
Pero lo que nos entra en los pulmones no se puede reciclar, las enfermedades a causa de la polución urbana siguen propagándose. Recientemente, la OMS informó que nueve de cada diez personas en el mundo, los que viven en las grandes ciudades y en San Salvador, respiran aire contaminado y que anualmente mueren unos siete millones de personas por causas relacionadas con la polución, como el cáncer de pulmón, enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
Y es fácil de entender, poniéndose en el lugar de una persona que espera en la parada hasta que llega su bus, todos los días, 20 minutos para ir y 20 para volver del trabajo. En esos 40 minutos tiene que “tragarse” el humo de por lo menos 20 buses que paran y arrancan con un chorro de humo negro.
Esta semana, por el congestionamiento a las 5:00 de la tarde, seguí de cerca a un bus que desde el semáforo antes de “Casa Presidencial”, a la que debieran cambiarle el nombre por “casa de las movidas” y el lugar de blanco, pintarla de gris (imagino cuando en el futuro organicen tours para niños les explicarán: “en esta sala se reunían para planificar la sofisticada trama del robo al Estado y transferirlo a cuentas privadas; y en este escritorio se firmaban los cheques...”). Volviendo al bus, desde la “Casa Presidencial” hasta la siguiente parada, aceleró 32 veces y en las 32 echo chorros de humo negro… ¡Imagine lo que poluciona este bus en todo el día y todos los días del año, y luego súmele todos los buses chatarra!
¿Qué nos muestra esto? La falta de interés de los transportistas y el Viceministerio de Transporte y también el Ministerio de Medio Ambiente por el medio ambiente, permitiendo que los buses circulen en condiciones que no cumplen ni el mínimo mantenimiento. “Se le fueron los frenos”, dicen las noticias… ¡Los frenos no se van, también es falta de mantenimiento y en otros países es demandable el descuido!
Señores diputados que nuevamente apoyan el subsidio a los buses, también exijan que les den mantenimiento, pues los costos directos e indirectos de las enfermedades que causa la polución nos los pagaremos cada ciudadano, usemos o no el transporte público y, por lo tanto, además del costo del subsidio para mantener los buses viejos, nos costará la hospitalización, el sufrimiento de enfermedades, la pérdida de productividad, porque estando enfermo no se trabaja y el valor agregado de cada enfermo a la economía y a su propia vida. ¡No, hombre, no es para eso que los eligieron!
Pues bien… Por todas las consecuencias de la polución, el “Día del Medio Ambiente” debiera también ser el “Día del Ser Humano”.
Ingeniero
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