Debido al enjambre sísmico que afecta los municipios de Chirilagua, de San Miguel, Intipucá y El Carmen, de La Unión, los peces de la laguna de Olomega se fueron a aguas más profundas, afectando la labor de los pescadores artesanales del sector.
Los habitantes de la zona aseguran que sacan menos cantidades de peces en jornadas entre ocho y 12 horas.
Las actividades turísticas también han disminuido debido a que los visitantes tiene temor de pasear en lanchas o bañarse en la laguna.
Antonio Sánchez, dueño de una lancha de transporte de turistas, explicó que es poca la gente que está llegando a la laguna porque tienen temor de que los temblores los sorprendan adentro del agua.
Desde el inicio de enjambre sísmico el 5 de mayo hasta ayer a las 9:00 de la mañana, el Ministerio de Medio Ambiente registró 1,140 sismos, con magnitudes que oscilaron entre 2.4 y 5.6, de los cuales 173 fueron reportados como sentidos por la población.
“Es poca la gente que viene, algunos se quedan a orillas de la laguna a ver el paisaje, eso nos afecta a los que trabajamos ofreciendo los paseos por toda la laguna”, agregó Sánchez.
José Cruz, pescador, salió a la faena, en su bote, remando desde las 4:00 de la mañana hasta las 10:00 de la mañana, durante esas seis horas de andar por toda la laguna logró sacar 20 libras de tilapia, de regular tamaño.
“Con estos temblores también el agua de la laguna se mueve y eso asusta a los pescados que salen huyendo buscando la profundidad y cuesta que salgan, es por eso que nosotros decimos que la pesca está mala, es poco lo que traemos para venderlo o el consumo en casa”, dijo Cruz.
La gobernadora Grisia Hernández manifestó que en las visitas realizadas a las diferentes comunidades de Olomega, la población no les ha manifestado que hay disminución de la pesca.
Cuando es buena la temporada logran sacar hasta 40 docenas o más de pescado, la mayoría de ese producto es ofrecido en los mercados de San Miguel y La Unión, a cinco dólares la docena.
Los pescadores y los dueños de lanchas que ofrecen paseos a los turistas esperan que la situación empiece a normalizarse y que dichas actividades sean más productivas.