Los homicidios de mujeres han tenido un incremento considerable en los cuatro meses de este año con relación al mismo período del año pasado.
Las cifras de la Policía detallan que 142 féminas han sido asesinadas entre el uno de enero y el 23 de abril de este año. Lo anterior representa un incremento del 24.6 por ciento con respecto a los primeros cuatro meses del 2017 en el que se registraron 114 muertes violentas de mujeres.
“Lamentable, porque antes la mujer no era víctima tan seguido o no estaba tan visibilizado, es una cosa delicada que hay que ponerle mucha atención”, advirtió el subcomisionado Ever Manzano.
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Las muertes violentas de la doctora Rosa María Bonilla Vega y de Graciela Eugenia Ramírez Chávez, son casos ejemplarizantes de la violencia que ejercen algunos hombres sobre sus parejas. Bonilla Vega habría sido asesinada por su compañero de vida en enero pasado y Ramírez Chávez presuntamente por su novio en febrero.
A estos crímenes recientes se sumó el de Jennifer Tatiana Criollo Landaverde, de 22 años, quien comenzaba a laborar en un comedor del mercado Zacamil. Fue atacada la mañana de este martes por supuestos pandilleros cuando se dirigía rumbo a su trabajo.
El hecho ocurrió en el cantón Guadalupe, de Apopa. El cadáver de Criollo Landaverde fue descubierto por personas que transitaban en las cercanías del redondel Integración.
Familiares dijeron que Jennifer Tatiana salió de su casa a las 5:45 de la mañana hacia su trabajo.
La joven caminaba a diario por el mismo sector, reveló una tía, quien agregó que ella nunca les había mencionado si había sido amenazada por las pandillas.
“Ella era una mujer tranquila, trabajaba para mantener a su niña de dos años, apenas hace tres meses había comenzado en el comedor del mercado”, señaló la tía.
Policía dice que fue amenazada
Contrario a la versión familiar, la Policía confirmó que la víctima había sido amenazada por pandilleros de la zona, pero no especificaron los motivos.
“Tenía al menos ocho disparos en su cuerpo, al menos dos de ellos en la cabeza”, dijo un agente de la Policía. Aún no hay sospechosos detenidos con relación al crimen de Criollo Landaverde.