El derrumbe de la Lotería en manos de ineficientes

Donde meten mano, las cosas comienzan de inmediato a deteriorarse, los negocios van a la quiebra, se vienen al suelo instituciones, lo que antes abundaba comienza a escasear...

descripción de la imagen

Por

29 March 2017

Hay una especie de sincronización que persigue a los de la extrema izquierda, la inversa del mítico Rey Midas, que convertía en oro lo que tocaba, mientras que aquellos convierten en desastre lo que manejan, desde instituciones hasta otrora prósperos países y regiones.

Donde meten mano, las cosas comienzan de inmediato a deteriorarse, los negocios van a la quiebra, se vienen al suelo instituciones, lo que antes abundaba comienza a escasear...

Se dice con un toque de humor que si el Sahara se convirtiera en una nación socialista, la arena iría rápidamente desapareciendo hasta sólo dejar la piedra lisa.

Como ha sucedido y sigue sucediendo con la otrora fuerte y emblemática institución que fue la Lotería Nacional de Beneficencia, ahora a nadie beneficia fuera de sus directivos.

La entidad está quebrada pues a los dos o tres meses que la tomaron, se vino al suelo. Se derrumbó por la ineficiencia para administrar, por las ocurrencias que fueron implantando, por procederes reñidos por la ética, por usar la institución como caja chica de diversos grupos, por no llevar registros, por enmendar actas escribiendo sobre ellas...

El último informe de auditoría de la Corte de Cuentas confirma lo que “todo el mundo” sabe: la Lotería carece de un sistema que controle las finanzas.

Los vendedores, por su parte, se quejan de lo que está sucediendo, pues temen perder lo que durante años ha sido su manutención.

De acuerdo con un informe de la Unidad de Acceso a la Información Pública de esa institución, la Lotería operó con pérdidas por $5.3 millones entre 2011 y 2015, después que durante su larga trayectoria fue una entidad rentable, que gozaba de la confianza de la población y que beneficiaba tanto a los que ganaban premios como a las entidades de servicio que participaban en las ganancias.

Lo que dentro está sucediendo refleja lo que es su forma de gobernar

Los directivos de la Lotería afirman que tienen pérdidas pues reparten ganancias, pero entre los beneficiarios de esas ganancias aparecen alcaldías que en ese momento estaban en poder del FMLN, como Mejicanos y Santa Tecla.

Las pérdidas no han impedido que la entidad pague contratos millonarios ($5.8 millones) por publicidad.

Las pérdidas tampoco han limitado erogaciones en prestaciones médicas para empleados por $2.3 millones entre 2011 y 2015 o que directivos de la Lotería tuvieran seguro médico privado entre 2012 y 2015 por $101 mil. Además de esto no hay ningún control o registro de qué tipo de consultas se han prestado; nada más se consigna en los libros cifras anuales, sin detalle ninguno.

Y desde luego los seguros no cubren a los vendedores.

En 2010, los auditores registraron alteración de actas sobre los billetes sobrantes de cinco sorteos. En resumen, la cantidad de billetes sobrantes no es coherente con los que se reportaba. Las actas tenían tachaduras y escrituras a mano, algo que va en contra de las mismas normas éticas de la Lotería.

De lo que todos en este país pueden estar seguros es de que tales anomalías, falta de controles, repartos en provecho propio, tachaduras y sinvergüenzadas, son el espejo de lo que sucede en el gobierno central, de llevar las cosas a la diabla precisamente para confundir y esconder.