Luego de la derrota sufrida por el partido oficial en las pasadas elecciones del 4 de marzo, el vicepresidente de la República, Oscar Ortíz, mencionó ayer que se concentrarán en revisar el sistema de subsidios.
El mandatario en funciones afirmó que esa será una de las prioridades del Gobierno al cerrar la vacación de Semana Santa y que va en línea con los cambios anunciados por el presidente de la República, Salvador Sánchez Cerén.
“Ese es uno de los compromisos en el corto plazo”, mencionó Ortíz durante una actividad en el Puerto de La Libertad.
Ortiz aseguró que el Gobierno ya tiene un equipo trabajando para definir la dirección. Los subsidios que se revisarán serán los de la luz eléctrica, el agua potable y el gas, sin dar mayores detalles.
“Con eso estaríamos revisando el tema de subsidios y esperaríamos tener noticias la próxima semana”, afirmó Ortíz.
Agregó que siempre en la línea de cambios anunciados por el Gobierno, se estarían concentrando en temas relacionados con el sector salud, con énfasis en la inversión, garantizando un buen uso de los medicamentos en el sistema hospitalario.
Recursos para subsidios, comprometidos
Los recursos para financiar los subsidios actuales ya están aprobados en el Presupuesto General de la Nación 2018.
Para el pago del subsidio a la luz eléctrica
se otorgaron directamente al Fondo de Inversión Nacional en Electricidad y Telefonía (FINET)
una partida de $50 millones mientras que el Ministerio de Economía (MINEC) tiene asignados $40 millones para los beneficiarios de subsidio al gas propano.
Estos fondos están contemplados tomando en cuenta el número actual de beneficiarios. En caso de aumentarlos, el Gobierno tendría que buscar una nueva fuente de financiamiento que aún no se ha explicado.
En el segundo semestre del año pasado el Gobierno hizo
una significativa reducción en el pago de subsidios disminuyendo su gasto a $170 millones después de pagar hasta $400 millones en 2008.
Entre los años 2014 y 2016, el Gobierno comenzó con un plan de reducción de costos en subsidios, luego que la finanzas públicas comenzaran a deteriorarse y el Gobierno no incorporara en su presupuesto gastos como el pago de la deuda de pensiones y otros.
La no inclusión de pago de pensiones incluso ocasionó que en el primer trimestre del año pasado, el Gobierno cayera en default por no pagar los $56 millones de deuda a los cotizantes de las AFP.
La crisis financiera del Gobierno venía desde el año 2016, cuando incluso debió crear una Contribución Especial para Seguridad (CES), pagada por la ciudadanía.