MADRID. Un total de 37 acusados por la mayor operación policial desarrollada en España contra la Mara Salvatrucha 13 (MS-13) aceptó las penas que van desde el pago de multas hasta los 13 años de cárcel, informaron ayer medios españoles.
Pero además afirman que, según la acusación de la Fiscalía española, la pandilla recibió dinero desde El Salvador para operar en España.
“Según el Ministerio Público, los acusados seguían el dictado de los jefes de la organización en El Salvador y Guatemala y recibían financiación desde esos países, al tiempo que obtenían fondos del tráfico de drogas”, dice en la nota del El Mundo.
Y en la publicación de 20 Minutos amplía que: “Para expandirse el grupo se habría nutrido económicamente a través de diferentes cauces. Por una parte, con el pago de una cuota de sus componentes, quienes llegaban a delinquir para hacer frente a la misma. Por otra parte, a través del apoyo económico de la dirección de la Mara Salvatrucha en El Salvador.
Según la investigación, llegaron a enviar 10,000 dólares desde este país para financiar las primeras actividades de la Mara en España”.
De acuerdo a la publicación de los medios españoles, los acusados expresaron su conformidad con el acuerdo alcanzado por sus defensores y la Fiscalía Anticorrupción antes del juicio.
El juicio oral contra los pandilleros comenzó el pasado 20 de febrero en la Audiencia de Alicante, pero había sido suspendido a petición del fiscal del caso mientras lo autorizaban para llegar a un acuerdo que luego ha sido modificado.
“La acusación pública ha rebajado la pena solicitada para los dos cabecillas de la organización de 30 a 13 años de prisión “en atención a las circunstancias personales y el arraigo” que los procesados tienen en España”, publica el portal 20 Minutos.
Y añade que “los acusados se han declarado culpables de los cargos de organización criminal, delito contra la salud pública, blanqueo de dinero, tenencia ilícita de armas, lesiones, amenazas, intento de asesinato y conspiración para asesinato”.
Durante la audiencia de ayer fue desplegado un fuerte dispositivo de seguridad de la Policía Nacional y la Guardia Civil, informan los medios.
El Mundo indica que entre los implicados hay tanto españoles como ciudadanos de origen latinoamericano e incluso marroquí y rumano, entre otras nacionalidades.
El diario explica que los acusados se beneficiarán en la futura sentencia de la aplicación de atenuantes de confesión y muchos de ellos eludirán el ingreso en prisión, debido a que han aceptado la culpabilidad de los delitos.
“Los 37 presuntos miembros y colaboradores de la Mara Salvatrucha que habían sido citados a juicio -otros cuatro están declarados en rebeldía y se hallan en busca y captura- se han conformado con penas que van desde el pago de multas hasta los doce años y mes de cárcel”, dice la publicación de El Mundo.
Explica que las condenas máximas corresponden a los hermanos Esteban Arnulfo y Pablo Antonio N.M., conocidos con los alias de “Darkin” y “Bigman”, respectivamente, y que se encuentran en prisión provisional.
La llamada operación Cruasán permitió a la Guardia Civil desarticular en marzo de 2014 la cúpula de la pandilla cuando su desarrollo era aún incipiente y frenaron sus planes para expandirse en España, además de abortar dos posibles asesinatos, agrega.
Y dice que entre los procesados han estado los presuntos cabecillas de las distintas “clicas” que se agruparon para constituir el “Programa 34”, como denominaban a su proyecto de expansión en España. Dicho “programa” tenía su sede central en la localidad alicantina de Ibi, en torno a la clica Big Crazy, y contaba con ramificaciones en Madrid, Gerona y Barcelona.
Otro dato que publica El Mundo es que según la acusación fiscal, cabecillas de la MS conspiraron para matar a un testigo del apuñalamiento de un presunto miembro de una pandilla enemiga, conocida como Latin Kings, ocurrido en el puerto de Alicante en agosto de 2012.