La elección de magistrados de la Corte Suprema de Justicia, cuyo foco principal será la renovación casi total de la Sala de lo Constitucional, ha sido el tema central de la campaña de Marcela Villatoro.
En esta entrevista, la candidata por la casilla 12 de San Salvador y militante de Arena desde los 14 años asegura que la elección de magistrados independientes será su prioridad principal.
¿Cuál es la importancia de esta elección mientras hay voces que llaman a votar nulo?
El llamar a que la gente vote nulo es una irresponsabilidad. Tenemos una elección muy importante porque este año elegimos a cinco magistrados de la Corte Suprema de Justicia, cuatro de los cuales van a la Sala de lo Constitucional. No solo hay que verlo en el sentido de que hay que elegir magistrados como se hace cada tres años, sino estos tienen un mandato de nueve años. Si elegimos un presidente es por cinco años; si elegimos diputados es por tres años. Los magistrados duran nueves años, estamos hablando de tres períodos de diputados o de dos períodos presidenciales. Ellos garantizan que se respete la Constitución de la República, por eso es importante tener a las personas idóneas y que los diputados que asuman esta legislatura conozcan la responsabilidad que tienen respecto a este tema.
¿Es esta tu bandera? ¿La Sala de lo Constitucional y el estado de Derecho?
Sí, como abogada que soy tengo una responsabilidad en el tema del estado de Derecho y creo que hay que hacer reformas al Reglamento Interno de la Asamblea Legislativa en este sentido. He estado en la Comisión Política de la Asamblea Legislativa y he visto varias situaciones en las que no se ha elegido a personas idóneas, así que le he tomado bastante importancia. Es mi prioridad número uno en este momento.
¿Cómo afecta una Sala más o menos independiente el día a día de un ciudadano común?
Las decisiones de la Sala abordan muchos casos. Vimos el caso del Sitramss, propio de la colectividad; varias decisiones de la Asamblea sobre educación, salud, seguridad. Ha resuelto sobre el tema de las medicinas en los hospitales y el derecho a la salud. Por eso debemos estar presentes y atentos de que tengamos una Sala de lo Constitucional que vele por nuestros derechos. Necesitamos de personas que conozcan de derecho y que no tengan preferencia por un partido o por otro.
Tus adversarios dirían que durante los famosos “20 años de Arena” no hubo avances en cuanto a independencia judicial. ¿Cuál es tu apreciación en términos de estado de Derecho durante el tiempo que tu partido estuvo en el gobierno?
Críticas siempre van a haber, ninguna entidad es completamente perfecta. Pudimos haber cometido algunos errores; sin embargo, ahorita estamos completamente comprometidos con el estado de Derecho y estamos trabajando para ello. Hemos respetado y acatado todas las decisiones de la Sala de lo Constitucional que se han dado en los últimos años. También hemos reprochado con el FMLN e incluso otros partidos han tomado decisiones queriendo poner en mal a la Sala o haciendo manifestaciones en contra de sus miembros. Tenemos que respetarlos como personas y en sus funciones que ellos desempeñan en este momento.
En 2011 Arena aprobó el decreto 743, que intentaba neutralizar a la Sala, y buena parte de los diputados que aprobaron ese decreto están corriendo por la reelección.
Eso es algo que ellos personalmente tendrán que responder al respecto. En mi caso soy nueva, soy de las nuevas generaciones del partido y tengo ese compromiso con el estado de Derecho y es en lo que quiero trabajar.
De cara al futuro inmediato, ¿qué se tiene que hacer para lograr una Sala de lo Constitucional independiente?
Hay varios temas. El primero es el compromiso que tiene que tener la Asamblea Legislativa. Siempre arman una subcomisión para hacer entrevistas con los candidatos que van llegando, pero usualmente en las entrevistas ya están las preguntas hechas previamente. Cuando tú vas a una empresa para pedir un trabajo jamás te van a dar las preguntas, es ilógico. He visto que hay candidatos a los que les preguntan -me acuerdo con el caso del Tribunal de Ética Gubernamental- sobre cierto concepto y las personas dan la misma respuesta sacada de Internet.
El otro tema es que se incorpore a la sociedad civil, a las universidades y a quienes se dediquen a velar por la transparencia en este proceso. Usualmente es a puertas cerradas y es importante que esto se abra para los medios de comunicación y para la gente en general, de tal forma que cualquier anomalía que se observe se denuncie.
El tema partidario es otro: te piden que no tengas vinculación partidaria, pero solo piden al Tribunal Supremo Electoral que extiendan una constancia de no afiliación cuando hemos tenido a personas, elegidas para este tipo de cargos, que se desafilian unos meses antes de ser nombradas o que fueron asesoras de algún partido en la Asamblea.
¿Te comprometes a no favorecer a un candidato que esté vinculado con un partido político?
Sí, porque tiene que ser personas que defiendan el estado de Derecho.
Y cuando hablas de transparencia, ¿qué tan transparente estás dispuesta a ser en este proceso?
Si quedo electa pediré a mi partido que me permita ser miembro de la Comisión Política. Si no me lo permiten, porque habitualmente ahí están lo jefes y subjefes de fracción, pediré que se me permita estar durante todo el proceso para ser parte y comunicarle a todos los ciudadanos sobre lo que ocurra.
Pero es distinto que tú le cuentes a los ciudadanos a que haya una cámara grabando en vivo durante estas reuniones y que tanto la prensa como la ciudadanía tengan acceso a estas discusiones.
Por supuesto. Yo lo he visto en la Comisión Política: entran, se encierran y después dicen que la prensa puede pasar cuando ya los candidatos están en un pizarrón y los miembros votan. Eso no debe ser así, sino que la prensa esté presente de principio a fin. Por eso debe hacerse un protocolo en el que se explique también los requisitos que debe tener la persona para optar por el cargo; que sea una persona conocimientos administrativos, judiciales, constitucionales en el caso que la persona aspire a una magistratura en la Sala de lo Constitucional.