Sin novedad en el frente

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22 abril 2013

En enero de este año escribí un artículo llamado El Punto de Inflexión, en el que noté como el candidato Norman Quijano había estado cayendo drásticamente en su popularidad desde su cúspide en mayo de 2012, que se dio justo después de que fue electo alcalde de San Salvador.

En ese momento mucha gente descartó la posibilidad de que su la popularidad siguiera declinando, arguyendo que había varios eventos en el futuro que revertirían la tendencia, principalmente el lanzamiento del candidato a vicepresidente, la reestructuración del partido, el nombramiento de nuevos asesores políticos, la generación de ideas para el plan de gobierno y la estabilización de la campaña.

?Sin Ahora, tres meses después, ya todos estos eventos vinieron y se dieron (aunque todavía no hay ideas para el plan de gobierno).

Sin embargo, como puede verse en la gráfica 1, la declinación no ha cesado.

La gráfica muestra la intención de voto por Quijano (en azul) y por Sánchez Cerén (en rojo) en el último trimestre de 2012 y en el primero de de 2013, según las mediciones de Mitofsky, Inmore y Jabes, que realizaron encuestas en esas fechas.

La intención de voto por Quijano ha bajado sustancialmente en las tres mediciones, mientras que la intención por Sánchez Cerén subió en dos de ellas (Mitofsky y Jabes) y cayó levemente en la tercera (Inmore).

La gráfica 2 incluye al candidato Tony Saca, que no se puso en la primera gráfica para no volverla confusa con demasiadas líneas.

Es notorio que la única tendencia que es uniforme en las tres encuestadoras es la declinación de Quijano. Con respecto a Saca, Jabes e Inmore reportan aumento y Mitofsky declinación.

?Sin ¿Qué indican estas tendencias para el futuro?

¿Qué podemos inferir de lo que la gente dice ahora para proyectar lo que harán en febrero de 2014?

Por supuesto, falta tanto tiempo para las elecciones que es muy difícil proyectar cuales serían sus resultados y las tendencias actuales no tienen por qué mantenerse en el futuro.

De hecho, los partidos políticos hacen encuestas precisamente para ver como se pintan las cosas en el presente para tomar acciones que las harán cambiar en el futuro.

Es por eso que un análisis de las tendencias como el que se presenta en los siguientes párrafos puede ser útil.

El análisis se hace con los promedios de las cifras de las tres encuestadoras.

La gráfica 3 muestra que del último trimestre de 2012 al primero de 2013 Quijano perdió siete puntos, Sánchez Cerén ganó cuatro y Saca ganó dos.

Es claro que si no hay un cambio radical en las tendencias, Sánchez Cerén pasaría a liderar la carrera electoral en un par de meses.

Esto más, extrapolando las tendencias, Saca igualaría a Quijano en 26 puntos de intención de votos en tres o cuatro meses, y de allí en adelante se posicionaría en un segundo lugar, detrás de Sánchez.

Como se ve en la gráfica, este resultado se daría más por la caída de Quijano que por el ascenso de Saca.

La tendencia ascendente de Sánchez, sin embargo, no es suficiente para lograr un triunfo en primera vuelta (a su tasa de crecimiento, estaría llegando al 50 por ciento de los votos en Noviembre de 2015).

Por tanto, habría una segunda vuelta, que se correría entre Sánchez Cerén y Saca.

Quijano habría quedado eliminado a mediados de este año.

?Sin La gráfica 3 muestra la proyección de estas tendencias en la primera vuelta.

En ella se ve claramente cómo, si se extrapolan estas, la primera vuelta terminaría con Sánchez Cerén con cerca de 38 por ciento de los votos y Saca con cerca de 32 por ciento mientras que Quijano estaría muy por debajo de ellos.

?Sin Es decir, la segunda vuelta se daría entre Sánchez Cerén y Saca.

La gráfica 5 muestra que en ésta segunda vuelta Saca aventajaría a Sánchez Cerén por nueve puntos si esta se llevara a cabo ahora.

Sin embargo, Sánchez Cerén está cerrando esta ventaja. Si se extrapolan las tendencias, Saca y Sánchez Cerén empatarían en 41 puntos a fines de 2013, y de allí en adelante la ventaja la llevaría Sánchez para ser electo en febrero de 2014.

?Sin Ahora podemos analizar una segunda posibilidad, menos probable en la lógica de este análisis: ¿qué pasaría si la segunda vuelta no se corriera entre Sánchez y Saca sino entre Sánchez y Quijano? Como en el caso de Saca, la gráfica 6 muestra que si Quijano llegara a segunda vuelta, y si esta se corriera ahora, ganaría confortablemente.

Sin embargo, la intención de voto por Sánchez Cerén en segunda vuelta tiene una tendencia ascendente mucho más fuerte que la de Quijano.

Si estas tendencias se mantuvieran, Sánchez alcanzaría a Quijano en Diciembre de 2013 o enero de 2014.

Las tendencias muestran que antes de esto alguna de las líneas, o ambas, tendrán que cambiar de rumbo para acomodar la restricción de que los números no pueden sumar más de 100.

Es claro que la elección de segunda vuelta sería cerradísima, con ventaja para Sánchez.

?Sin Una tercera posibilidad, aun menos probable, es que la segunda vuelta se corra entre Quijano y Saca.

En este caso, como se ve en la gráfica 7, las intenciones de voto han estado bajando para Quijano y subiendo para Saca tan aceleradamente que la ventaja del primero sobre el segundo ha bajado de 14 puntos en el ultimo trimestre de 2012 a 4 puntos en el primero de 2013.

Esta reducción de la ventaja se ha dado más porque la intención de voto por Quijano ha bajado (7 puntos) que por el aumento de Saca (3 puntos). Si las tendencias mantuvieran el ritmo actual, las intenciones estarían empatadas en 35 puntos en un par de meses, y de allí en adelante Saca tendría la ventaja para ganar en una segunda vuelta a Quijano.

?Sin En resumen: (a) hasta ahora las tendencias indican que la primera vuelta la ganarían Sánchez Cerén y Saca con gran margen sobre Quijano; (b) en la segunda vuelta, Sánchez Cerén tendría la ventaja para ganarle a Saca; (c) si la segunda vuelta se corriera entre Sánchez Cerén y Quijano, Sánchez también tendría la ventaja para ganar; y (d) si la segunda vuelta se corriera entre Saca y Quijano, ganaría Saca con gran margen.

Las cifras no son muy halagadoras para Quijano y ARENA.

Presentan un riesgo muy grande de que gane Sánchez Cerén o Saca.

En realidad, ARENA podría ganar sólo si las tendencias cambian drásticamente. ARENA puede pensar que ellas van a cambiar solitas, arguyendo que el electorado salvadoreño es moderado y por lo tanto va a imponer un techo al crecimiento de Sánchez Cerén, que es un radical.

Pero entonces, como se ve en las gráficas, el que ganaría sería Saca.

En todo caso, basar las esperanzas en que los otros candidatos van a dejar de crecer y van a comenzar caer más rápido que lo que ya está cayendo el propio no es la manera en la que se maneja una campaña tan importante para el partido y el país.

Eso fue lo que se pensó en 2008-2009 y los resultados hablaron por sí solos.

Esto no quiere decir que ARENA no puede ganar.

Sólo indica que si sigue como va no va a ganar, y que todas las cosas que ha hecho o dice haber hecho -la restructuración del partido, el lanzamiento del candidato a vicepresidente, el nombramiento de nuevos asesores políticos, y el nombramiento de una comisión para que haga el plan de gobierno-no han sido suficientes para compensar los problemas de fondo que tiene la propuesta de ARENA.

En términos de la intención de voto, la variable que más importa electoralmente, no hay novedad en el frente.

Las tendencias son las mismas o peores que hace tres meses.

Sin novedad en el frente

Manuel Hinds