El Ministerio de Hacienda dice que las pensiones representan el 50 por ciento del déficit fiscal.
Esto da la impresión de que los pagos de pensiones representan el 50 por ciento de los gastos del gobierno.
Pero eso no es cierto. Es sólo un truco para que la gente lo piense así.
La gráfica 1 muestra los rubros principales de gasto del gobierno.
Como se ve, el pago de las pensiones es el más bajo de estos rubros (en la gráfica sólo se han puesto cuatro rubros además de los de pensiones, pero éstas son menores que todos los que no se pusieron: bienes y servicios, gastos de capital e intereses).
Siendo el rubro más bajo de los gastos, ¿por qué echarle la culpa de los déficits?
¿Por qué no decir que los gastos corrientes son ocho veces el déficit, o que las remuneraciones son más de tres veces el déficit?
FUENTE: Banco Central de Reserva.
Estos son los gastos a Noviembre.
¿Pero qué tal el aumento de los gastos?
¿Será que este aumento del pago de pensiones ha sido tan grande que es lo que ha impedido que el Ministerio de Hacienda cumpla con sus obligaciones? La gráfica 2 muestra los aumentos anuales en los rubros principales desde el año que terminó en mayo de 2009 (el mes antes de que entrara el primer gobierno del FMLN) y el año que terminó en noviembre de 2014.
Oyendo lo estridentemente que se queja Hacienda, usted se imaginaría que el aumento en las pensiones ha sido el más grande de todos.
Mire la gráfica.
Ha sido el menor de todos-137 millones de 928 millones en gastos anuales que ha aumentado el gobierno del FMLN.
¿Por qué entonces echarle la culpa del déficit, cuando los gastos excesivos que todos conocemos son mucho mayores?
¿Por qué decir que no puede pagarlas en vez de decir que no puede pagar las abultadas cuentas de los funcionarios que viajan por todo el mundo sin ningún motivo sustancial?
FUENTE: Banco Central de Reserva.
En realidad, el pago de las pensiones es el único del que podemos estar seguros que no tiene desperdicio.
Sin embargo, es de lo único que protesta Hacienda.
No protesta por los obvios despilfarros en viajes, carros de lujo, recepciones de más lujo, proyectos mal concebidos que desperdician el dinero (como Sitramss), y similares.
Cuando le piden dinero para todos esos desperdicios, Hacienda los da sin rechistar.
Sólo basta que tenga que pagar pensiones-que son obligaciones que el gobierno mismo adquirió con los trabajadores-para que comience a quejarse amargamente, echándoles la culpa a ellas de lo que se debe únicamente a los desperdicios de los que ahora están en el poder.
Es obvio que al gobierno del FMLN no le gusta pagar las deudas que tiene con los trabajadores, a pesar de que el FMLN pretende defenderlos.
Prefiere subirse salarios, hacer viajes, hacer recepciones, que cumplir con una obligación fundamental con todos los trabajadores salvadoreños.
Pero tendrá que entender que tiene una obligación constitucional de pagar lo que les debe a ellos.
Debe dejar de dar la impresión de que los pagos de las pensiones son los culpables del aumento del déficit, rebajar los gastos superfluos que de verdad lo han causado, y pagar lo que los trabajadores se han ganado.
Viendo cómo el FMLN patea a los trabajadores, pensando que no tienen a nadie que los defienda, los otros partidos políticos deben darse cuenta de que los trabajadores no olvidarán quien los pateó y quien los defendió en este otro ataque les está haciendo el FMLN.
Estas cosas se pagan en las elecciones.
La mentira fiscal
Manuel Hinds