La idea original que el ISSS contara con un Hospital Regional (De referencia, tercer nivel de complejidad) en la ciudad de San Miguel se le debe al Dr. José Kuri Asprides, director general del ISSS a fines de los sesenta del siglo pasado, es decir hace aproximadamente medio siglo. De ahí la relevancia de la noticia de que el sueño se convertirá en realidad para beneplácito de todos los migueleños.
Por 1968, la única infraestructura hospitalaria propia del ISSS era el majestuoso Hospital General recientemente inaugurado en ese entonces, ubicado entre la 25a. Avenida Norte y la Juan Pablo, dañado severamente por el terremoto de 1986. El Dr. Kuri Asprides dio inicio a un periodo de crecimiento, desarrollo y dinámica institucional y si bien se carecía de infraestructura para extenderse al interior del país, no había otra opción que alquilar casas particulares y adaptarlas para que funcionaran como consultorios, y en cuanto a la hospitalización y atención de procedimientos, no hubo más alternativa que comprar servicios a la red pública de Minsal.
San Miguel no fue la excepción y se arrendó un viejo caserón que se remodeló para convertirlo en consultorio externo que en sus mejores días atendía de 600 a 700 consultas diarias, a su vez rentó la sexta planta del Hospital del Ministerio para salir adelante con la hospitalización, pagándose por separado el uso de quirófano, atención de partos, exámenes del laboratorio, estudios radiológicos, etc.
Las primeras instalaciones del ISSS en San Miguel con objetivo de brindar prestaciones de salud y cubrir los demás riesgos señalados por la ley, fueron resultado de la diligencia de los profesionales siguientes: Dr. Taufik Esmahan Granados, jefe de Planificación y Supervisión; Dr. Alfonso Cruz Palacios, jefe de División Médica; Dr. Rómulo Sosa y Lic. Agustín Chicas, quienes organizaron el primer Laboratorio Clínico; Dra. Vera Alicia de Navas organizó, fundó y puso en marcha la primera Farmacia de la institución; Dr. Ricardo Salvador Mendoza Tovar, jefe del Dpto. de Medicina Preventiva y Salud Reproductiva y la Lic. Gladys de Rosales fundó la oficina de Trabajo Social; y otros que escapan a la memoria. Complementaban el equipo anterior los profesionales de la Supervisión Médica, odontológica, de enfermeras y técnicos de la Unidad de Infraestructura.
Con el transcurrir de los años las instalaciones iniciales fueron insuficientes y empezaron a experimentar cambios, ampliaciones y remodelaciones. La hospitalización del ISSS en la sexta planta del hospital de Minsal se trasladó al Hospital Militar (3° Brigada) a mediados de los setenta a causa de daños causados por una tormenta.
Como era de esperar, el antiguo consultorio externo que venía funcionando en una propiedad particular se volvió anacrónico y el ISSS tuvo que construir un policlínico, esta vez en terrenos propios, con los correspondientes apoyos: amplias esperas, área administrativa, área de consultorios, Archivo Clínico, Farmacia, Laboratorio Clínico, Radiología, etc.
Posteriormente, obligados por las circunstancias y sobre todo para mejorar la calidad de la atención, se construyó la Unidad de Emergencia que desencadenó el advenimiento de nuevas dependencias como Central de Esterilización y Equipos, Lavandería y Ropería Hospitalaria, Mantenimiento, Almacén General, Transporte y otras dependencias no menos importantes.
Ante el incremento sostenido de la demanda de pacientes con insuficiencia renal crónica (IRC) se construyó la Unidad de Diálisis y Hemodiálisis contiguo al policlínico, separado del cuerpo del edificio.
En el transcurso de los noventa era imperiosa la necesidad de articular y consolidar los componentes citados anteriormente y que se encontraban dispersos, la idea era conjuntarlos para lograr un funcionamiento más coordinado además de apoyar a los centros de atención de menor complejidad distribuidos en la zona oriental. El diseño del nosocomio se completó hará cosa de cuatro o cinco años y la construcción se inició hace apenas unos meses, más vale tarde que nunca.
*Colaborador de El Diario de Hoy.