Las sociedades son dinámicas e incluso la Constitución, que supone fundamentar la estructura básica del Estado, debe adaptarse a los nuevos tiempos para sobrevivir. Más de una decena de constituciones salvadoreñas perecieron, precisamente, ante coyunturas críticas de cambio.
La primera prueba de adaptabilidad de la Constitución de 1983 tuvo lugar en uno de los períodos más trascendentales de la historia reciente de El Salvador: la negociación de la paz entre el gobierno y el FMLN.
Luego de consensuar las reformas entre el gobierno, el FMLN y los partidos de oposición representados en la Asamblea Legislativa, en abril de 1991 se acordó reformar 36 artículos de la Constitución e introducir ocho disposiciones transitorias, lo cual se ratificó en la legislatura siguiente.
La redacción y motivación de la reforma estuvo a cargo del Ministerio de Justicia y abordó cuatro áreas: el Órgano Judicial, los derechos humanos, el sistema electoral y la seguridad pública.
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El Órgano Judicial
Uno de los objetivos centrales fue fortalecer la independencia y las capacidades del Órgano Judicial. Entre las medidas aprobadas, destaca el sistema escalonado de elección de magistrados de la Corte Suprema de Justicia, la cual se renovaría en un tercio cada tres años. Los candidatos los propondrían las asociaciones de abogados y el Consejo Nacional de la Judicatura a la Asamblea Legislativa.
Los derechos humanos
A raíz de las graves violaciones a los derechos humanos, se creó la Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos y se encargó la investigación del delito a la Fiscalía General de la República.
También se facultó al Órgano Legislativo de obligar al presidente de la República destituir a jefes de seguridad pública o de inteligencia cuando se haya investigado y encontrado violaciones a los derechos humanos.
El sistema electoral
El Consejo Central de Elecciones se convirtió en el Tribunal Supremo Electoral, integrado por cinco miembros -dos adicionales provenientes de ternas propuestas por la Corte y elegidos por mayoría calificada de los diputados.
La seguridad pública
La intervención permanente de la Fuerza Armada en la política del país y su responsabilidad en violaciones a los derechos humanos obligó a reformar la base constitucional de esta institución y del manejo de la seguridad pública en El Salvador.
La creación de la Policía Nacional Civil -una nueva entidad independiente del Ejército- supuso despojar a la Fuerza Armada de su control de la seguridad pública y limitarla a defender la soberanía del Estado, la integridad del territorio y el mantenimiento de la paz.