S&P eleva calificación crediticia de El Salvador, pero sigue siendo "vulnerable"

Calificadora bajó al país la nota de deuda el lunes, pero este martes la volvió a subir

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Según Asafondos, la ley aclara que reestructuración solo puede ser para mejorar condiciones de tenedores.

Por Vanessa Linares

03 October 2017

La agencia calificadora de riesgo Standard and Poor’s (S&P) rebajó el lunes la nota soberana de El Salvador y le asignó “impago selectivo”, pero este martes por la noche cambió de decisión y volvió a asignarle la misma nota que tenía previamente.

En ambos casos, la agencia hace su análisis a partir de la reforma de pensiones que la Asamblea Legislativa aprobó la semana pasada.

Este martes, a las 6:53 p.m. hora de El Salvador, la agencia emitió un comunicado informando que elevaba la calificación para El Salvador a CCC+, es decir, la misma que tenía antes del comunicado de la misma Standard & Poors había emitido la noche anterior (lunes).

Standard & Poors cambió así dos veces la nota al país en menos de 48 horas.

El analista Mauricio Choussy, dijo que un cambio de nota en un periodo de tiempo tan corto es usual “cuando hay una reestructuración en proceso”.

En el comunicado emitido el lunes, la agencia calificadora consideró que El Salvador cayó en situación de “impago selectivo” al cambiar las condiciones con las que pagará su deuda de pensiones.

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Para S&P, cuando las “obligaciones financieras se recompran por un monto en efectivo o se reemplazan por otros instrumentos que tienen un valor total menor al valor par”, son suficiente razón para considerar que un país está incumpliendo con su obligación.

Y es que las reformas aprobadas la semana pasada determinan que los Certificados de Inversión Previsional (CIP) -instrumentos con los que el gobierno presta dinero al fondo de ahorro de los trabajadores para pagar las pensiones del antiguo sistema (ISSS e INPEP)- tendrán un mayor plazo de pago, un periodo de gracia para los pagos de capital, y una tasa de interés más alta.

“En nuestra opinión, estos cambios son una oferta angustiada más que puramente oportunista”, criticó la empresa estadounidense, que la noche de este lunes emitió su informe de revisión de la calificación de riesgo soberano del país, bajando la calificación de las emisiones de largo plazo y a corto plazo, en moneda extranjera y en moneda local, de El Salvador de “CC” y “C” a “SD” (Default Selectivo).

Según explica S&P, “Una obligación calificada ‘CCC’ es vulnerable a un incumplimiento de pago y depende de condiciones del negocio, económicas, y financieras favorables para que el deudor cumpla su compromiso financiero con dicha obligación. En caso de condiciones del negocio, económicas, o financieras adversas, no es probable que el deudor tenga la capacidad de cumplir su compromiso financiero con la obligación”.

Espera revisión

La Secretaría Técnica y de Planificación de la Presidencia emitió también un comunicado destacando que los “pasos importantes” tomados en los últimos días , “con el apoyo y consenso de todas las fuerzas políticas, las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP) y los tenedores de bonos y certificados de inversión previsional” tiene como fin de mejorar las perspectivas crediticias y de solvencia del país.

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El gobierno informó que con el cambio de los CIP antiguos por los nuevos por un valor de $5,977.2 millones, y la reforma de pensiones, se eliminó el riesgo político y de impago.

El presidente de la Asociación Salvadoreña de Administradoras de Fondo de Pensiones (Asafondos), René Novellino, aseguró la semana pasada que en la ley quedó establecido que la reestructuración solo puede ser para mejorar las condiciones de los tenedores. Estimó que en términos de valor presente, los trabajadores van a recibir $600 millones más en sus cuentas por la reestructuración de CIP.

Sobre la aprobación de la reforma de pensiones, S&P dijo que aunque evidencia un importante acuerdo político que aliviaría el déficit estructural del Ejecutivo y reduciría su déficit de necesidades de financiamiento, aún queda pendiente un acuerdo fiscal.