¡Dejen en paz a la Sala!

Muy grave es que el mismo secretario de Comunicaciones de la Presidencia salga en defensa y aprobando a grupos desestabilizadores que atacan a los magistrados de la Sala.

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28 September 2016

Para ser malo no se estudia. Así nos lo está demostrando el FMLN con el rumbo que le está dando al manejo del país, el cual parece estar basado en el absoluto irrespeto a la institucionalidad.

Desde el presidente de la República, quien luego de la orden explícita de la Sala de lo Constitucional, que lo obligaba a pedir permiso por cada salida del país, lo cual no ha hecho; hasta las cada vez más frecuentes manifestaciones organizadas por el FMLN para atacar a los señores magistrados de la Sala, lo que vemos aquí es un partido de gobierno que no quiere asumir el respeto constitucional que juró el presidente el día que asumió como tal.

Si bien la democracia obliga a la alternancia, en el caso de El Salvador ha quedado en evidencia que el FMLN sencillamente no estaba preparado para gobernar.

El resultado salta a la vista: un país a punto de caer en el déficit fiscal, desempleo, mínimo desarrollo de infraestructura, irrespeto a la institucionalidad, corrupción y despilfarro, muy bajo nivel educativo y la peor polarización que se ha visto hasta ahora.

El caso de los constantes ataques a la Sala de lo Constitucional es, quizás, de los más graves, porque su fin es desarmar una institución que hasta la fecha y a pesar de cualquier desacierto, es la que mejor ha resguardado la democracia en el país.

Muy grave es que el mismo secretario de Comunicaciones de la Presidencia salga en defensa y aprobando a grupos desestabilizadores que atacan a los magistrados de la Sala, y que todos sabemos son movilizados por el FMLN y que en la mayoría de casos se trata de empleados de instituciones del Estado, que tal como lo hemos denunciado, son quienes forman parte de la grasa del Estado, activistas que cuentan con más de 40 mil plazas gubernamentales y que son utilizados para desestabilizar al país.

Lo más preocupante del caso es que ha sido a raíz de que en los últimos tiempos se han destapado muchas ollas hediondas cuyo contenido apesta a corrupción, que el FMLN ha incrementado su accionar a través de sus activistas.

También es grave que culpen a la Sala de lo Constitucional por no poder contar con 900 millones de dólares más para botar a la basura y hagan que sus turbas presionen para, según ustedes, obtenerlos. No es culpa de la Sala que ustedes no sepan administrar los recursos.

Porque basta con hacer un recuento de la enorme cantidad que se les ha aprobado en préstamos y que, o han ido a parar a destinos desconocidos, o han sido utilizados para pago de más plazas,  compra de vehículos de lujo, licores o para el uso discrecional de funcionarios, como si el dinero de erario público fuera su caja chica personal.
 

Los salvadoreños sencillamente  están hartos. Entre la situación de violencia, que no han podido resolver porque sus estrategias solo se han basado en más impuestos y préstamos para ello, hasta la tremenda inestabilidad que han traído al país, la gente está cansada.

Quizás sea necesario recordarles que los tiempos en que andaban en el monte haciendo lo que les diera la gana, sin leyes ni normas que respetar quedaron atrás. Porque al firmar la paz, firmaron también su compromiso para comportarse como ciudadanos dignos de la patria que compartimos con ustedes.
  


*Diputada