¿Cuánto nos cuesta qué? Pues todo lo que se podría hacer bien y por negligencia, no saber como hacerlo, mala organización, falta de supervisión, irracionalidad, desconocimiento, restricción mental o como el dinero es “del gobierno” y no pasa nada si se despilfarra o se malgasta, se hace mal las cosas o se cometen errores estratégicos y tácticos que directa o indirectamente van contra los intereses de los que pagamos impuestos.
Varios ejemplos: ¿Cuánto cuesta de más una reparación en una carretera en la que, a simple vista, no hace falta una toma de tiempo, en lugar de 8 obreros que serían los necesarios, hay 20?... Fácil: el sueldo de los 20 menos el de los 8, multiplicado por los días que duró la obra… Y como son muchas las obras, así de mucho son los gastos excesivos en dinero y en los días que se prolonga la restricción del paso vehicular.
¿Cuánto nos cuestan los empleos innecesarios que se crean para asegurar votos en las próximas elecciones?… Fácil: el sueldo multiplicado por el número de personas contratadas por los meses que los contrataron antes de las elecciones.
Viendo las fotos que se publicaron en El Diario de Hoy el miércoles sobre los quehaceres de los diputados en la Asamblea… ¿Cuánto nos cuestan sus horas de distracción con asuntos que no tienen nada que ver con representar dignamente a quienes los eligieron? Fácil: el sueldo más la dietas, viáticos, comidas, bebidas que consume cada diputado, dividido por 30 días y por 8 horas de cada día, y luego, multiplicado por las horas de relax que disfrutan en la Asamblea entre risas, revisión de las redes sociales y otras ocupaciones, multiplicado por el número de diputados.
¿Cuánto cuestan los bordillos mal hechos por el MOP en las avenidas, que ojalá pronto quiten por los daños que producen en las llantas?… Como los obreros que los hacen quizás no tienen carro, no saben que si una rueda se topa con el “filo del bordillo” se hiere, daña y reduce su resistencia a más de la mitad… Yo las cambio, pero estoy seguro de que muchos miles de vehículos andan con las ruedas mordidas, y un mal día por alguna maniobra en una curva cerrada o el sobrepeso, la rueda dañada en los filosos bordillos explotará y causarán accidentes con muertos que nadie investigará. ¡Gracias, señores del MOP, por tan brillante idea! En el parqueo de Las Cascadas pueden ver cómo se hacen los bordillos.
Y... ¿Cuánto nos cuesta en desprestigio nacional e internacional que las autoridades sigan apoyando al gobierno de Venezuela, cuando todos los países del Primer Mundo, la OEA y EE. UU. están pidiendo reformas democráticas y hay grandes demostraciones en Europa en favor de la democracia.
¿Cuánto nos cuesta que en los hospitales no haya medicamentos y las enfermedades e incapacidades por malestares de tres días se prolonguen al doble y al triple?… También fácil: el valor agregado y la producción que no hacen en las empresas los que en lugar de estar trabajando están en casa por falta de medicamentos…
¿Y cuánto nos costarán los gastos adicionales por el incendio en las Tres Torres? Eso… ¡Cuando el dinero no es de uno, no importa cuánto cuesta!… Pero, señores, al final, directa o indirectamente nos cuesta a todos, porque el país no progresa.
*Columnista de El Diario de Hoy.
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