El ministro de Seguridad y Justicia, Mauricio Ramírez Landaverde, volvió a defender ayer la propuesta de ley de prevención social que ha sido presentada a los diputados, en la que se ordena a los medios de comunicación autorregularse respecto a sus contenidos relacionados con la inseguridad que vive el país.
Ayer volvió a negar que se esté intentando regular a los medios y añadió que no están entrometiéndose en el ejercicio periodístico, pues lo que plantea la ley respecto al papel a jugar por los medios dentro de ese sistema de prevención social no tiene que ver con la labor informativa.
Según dijo, esta ley no significa una “intromisión” o “una búsqueda de regular de forma indebida” la labor informativa, sino de “reconocer la importancia y el rol que pueden jugar (los medios) en el desmontaje de la violencia”.
“Los medios de comunicación son actores importantísimos y eso no se refiere a la labor informativa, esa es otra cosa, estamos hablando del papel que pueden jugar los medios de comunicación social...”, agregó Ramírez Landaverde.
Para él, lo que se pretende con la propuesta de ley es orientar a nuestra sociedad, introducir nuevas conductas, actitudes con la cobertura que hacen los medios.
El polémico artículo 30 de la ley propuesta por el Gobierno establece que los medios “deberán contribuir a la prevención de la violencia mediante la “autorregulación”.
“Los medios de comunicación deberán contribuir en la promoción de la prevención de la violencia, la convivencia y la cultura de paz en la población, procurando la autorregulación ética de la información y contenidos no violentos, para no afectar la salud mental de la población...”.
Pero a la vez justifica en ese mismo artículo que esa autorregulación impuesta, se hará “sin perjuicio del respeto a la libertad de expresión, de prensa y de información”.
Ramírez Landaverde incluso comparó que hay artículos que tocan a la academia y esta no ha reaccionado, pese a que les manda a que investigue el tema de la seguridad, haga análisis y produzca documentos que puedan ser analizados e implementados por las instituciones de Gobierno.
“¿Pretender o buscar eso va a transgredir la libertad de cátedra que debe prevalecer en una sociedad democrática?, podríamos tener de parte de la academia el diseño”, dijo.
También tomó el ejemplo de la empresa privada, a la que dice que la ley manda a crear, por ejemplo, empleo para jóvenes en riesgo y personas privadas de libertad, todo con el fin de ayudar a construir un puente hacia la paz, la convivencia y el diálogo.
Según el ministro, la idea de establecer roles a medios, empresa privada o academia, por ejemplo, es porque constituyen “actores importantísimos” de la sociedad.