El viceministro de Políticas de Salud, Eduardo Espinoza, declaró, ayer en una entrevista televisiva, que la “escasez” de medicamento podría abarcar otros hospitales de la red pública.
El registro de abastecimiento de hospitales ha estado a la baja desde enero hasta abril, de acuerdo al documento oficial obtenido a través de la Oficina de Información y Respuesta del Ministerio de Salud (Minsal).
En enero el promedio nacional de abastecimiento de fármacos en los 30 hospitales públicos era de 87.3% y en abril fue de 83.45%. Sin embargo en ese lapso, hubo hospitales cuyo porcentaje de abastecimiento fue de 71.3%, en el caso del sanatorio de Santa Ana.El mes pasado, la crisis por la falta de fármacos fue más evidente en el caso del hospital Rosales, un sanatorio de referencia a nivel nacional, en donde a los pacientes les está tocando comprar fármacos e insumos, como suero, para poder ser tratados por el personal.
Según Espinoza, la falta de medicamentos puede suceder eventualmente, porque el presupuesto, no solo afecta al hospital Rosales, “sino que es global, entonces es una cuestión que la señora ministra está gestionando ante las autoridades correspondientes y que todo el sistema está en función de que eso no vaya impactar negativamente en la salud de la población, sobre todo en enfermedades críticas”. Una de las formas que las autoridades de Salud han encontrado para paliar la crisis es el préstamo de medicina entre hospitales de la red pública y al Seguro Social.
Pero esa alternativa es criticada por los diferentes sindicatos y por organizaciones de salud, las cuales coinciden en señalar que la medida no da respuesta al desabastecimiento de fármacos en los hospitales.
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Silvia Navarrete, del Sindicato de Trabajadores de Salud (Sitrasalud), opina que las autoridades no han logrado mantener el equilibrio para dar un buen servicio de salud y lograr la motivación de los empleados.
“Esas son medidas erradas de partes de las autoridades porque ellos tenían que buscar una solución real a la problemática y no estar con eso de prestar a un hospital, porque están tapando un hoyo, pero están abriendo otro. No están solucionando nada, a nosotros los empleados nos quitaron el escalafón bajo el pretexto que si nos daban el escalafón no iban dar medicamentos y no iba haber alimentación para los pacientes, no nos dieron el escalafón y tampoco abastecieron de medicamentos los hospitales y no hay insumos”, denunció la sindicalista.
A criterio del médico del hospital Zacamil y vicepresidente el Colegio Médico, Carlos Ramos Hinds, las autoridades de salud se excusan en la tardanza en la compra de medicamentos para explicar la escasez.
“Ellos son bien hábiles y manejan un discurso ambiguo en el que ellos aseguran que hay medicamentos en existencia, pero no dicen cuánto tiempo va durar o como han hecho para tenerlo en existencia, porque a veces son préstamos que se hacen de un lugar a otro y a veces son pequeñas compras que van a durar un par de días”.
Para Navarrete, el desabastecimiento a nivel nacional “es real, las autoridades lo quieren encubrir, pero ahorita ya no tienen cómo, porque ni siquiera pueden prestarles a otros hospitales, el problema es bastante serio”.
El viceministro Espinoza declaró, en televisión, que no se oculta la crisis, pero que los sindicatos en sus denuncias no se dice toda la verdad en torno al origen de la problemática. Salud espera recibir la compra de medicina en julio y agosto.
Para el 2016, el Minsal tuvo un monto para la compra de medicamentos de 47 millones 797 mil 108 dólares, mientras que la asignación para 2017 es de 34 millones 496 mil 187 dólares.
Hace varios años, el Ministerio de Salud publicaba en su la página web el registro del cuadro básico de medicamentos y su nivel de abastecimiento, en cada uno de los hospitales; sin embargo dejaron de hacer pública la información.