Sí... Esto concluimos con unas señoras trabajadoras que pertenecen al grupo de GT, para diferenciarlos de los GH... La GT son gente sana que se dedica a su trabajo y se preocupan por hacerlo bien todos los días, desde que llegan en la madrugada a la empresa, hasta que vuelven a sus casas para continuar con las labores que una mujer realiza para que las cosas en el hogar estén en orden...
¿Y cuáles son los cinco milagros de aquí, que en otros países son cosas normales?... Son los que deseamos sucedan los salvadoreños, en el país más violento del mundo, según las noticias, los indicadores internacionales de violencia y las alertas internacionales sobre el riesgo de viajar a El Salvador...
El primer milagro en todas las madrugadas es darse cuenta que la mente y el cuerpo despiertan después de una noche de sueño y levantarnos para prepararnos, desayunar y dirigirnos al trabajo...
El segundo milagro es salir a la calle a pesar del miedo por la amenaza de un asalto o que en el bus se suban delincuentes exigiendo dinero o requisando los celulares... Y lo peor, que un pasajero armado defendiéndose organice una balacera y con un poco de mala suerte resultar herido o muerto por una bala perdida...
El tercer milagro es ya en la empresa, dar gracias a Dios y cambiar el chip del miedo por el de la motivación, realizar como “GT” los trabajos que le asignen y hacerlos con la calidad y en el tiempo previsto...
El cuarto milagro es emprender el viaje de la empresa a la casa y antes de salir cambiar nuevamente el chip de la motivación por el de la precaución. Sobrevivir la apretazón dentro del bus sufriendo los riesgos, desde que el motorista se pasa los semáforos en rojo, hasta los empujones y apretones en el bus repleto...
Y el quinto milagro es conseguir llegar a casa, entrar, encerrarse y continuar con las labores de una mujer en su hogar para que la familia esté atendida.. Y llegada la hora de descansar, acostarse con la conciencia tranquila que no se le deseó, ni se le hizo mal a nadie y dormirse rogando a Dios, que mañana sea otro día en el que no suceda nada malo, ni a uno, ni a ningún miembro de la familia...
Pues sí, estoy de acuerdo con estas señoras, sobre que en El Salvador, hasta que los Poderes, Legislativo, Ejecutivo y Judicial consigan crear leyes estrictas, hacerlas cumplir y juzgar al que no las cumpla, seguiremos rogando que estos cinco milagros sucedan todos los días...
Bueno... Dos cosas más: Como parece que lo de “Unámonos para crecer” por lo visto no funciona, quizás hay que encontrar otra línea de pensamiento y trabajo efectiva y con menos “autobombo”, en la que los nuevos dirigentes del sector privado y el gubernamental, hagan cada uno lo suyo honrada y transparentemente en busca del crecimiento económico y la paz.
Y estando próximo el “Día de la Madre”, enhorabuena para todas... Si usted aun la tiene, abrácela fuerte, para que sienta su amor y agradecimiento... Y si ya se fue, recuérdela y agradézcale la vida y su dedicación.
*Columnista de El Diario de Hoy
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