LONDRES. Khalid Masood, el hombre que ha sido identificado como el autor de los atentados en Londres la tarde del miércoles, tenía antecedentes por delitos comunes aunque carecía de antecedentes por terrorismo. Sin embargo, informes de inteligencia le hallaron relaciones “extremistas”.
La primera ministra Theresa May informó de esos vínculos ante el Parlamento ayer y confirmó que Masood era un hombre nacido en Reino Unido que estuvo desde hace años en el radar de los servicios de inteligencia británica, según consigna el periódico español El País.
Los antecedentes de Masood, un hombres de 52 años nacido en el condado de Kent, se conocieron en momentos en que el autodenominado Estado Islámico (ISIS en inglés) se atribuía el atentado. La policía ha asegurado que no tenía ningún indicio de que pudiera estar planeando un atentado terrorista. Según El País, la principal hipótesis que manejan los investigadores es que el atacante estaba “inspirado en el terrorismo internacional islamista”.
“El agresor, según expertos en lucha antiterrorista consultados por la radio pública, se trataría de una de las tres millares de personas que se encuentran bajo el radar de Scotland Yard o el MI6, a las que, materialmente, no pueden someter a un seguimiento diario”, reporta El País.
Lo inmediato que buscaban ayer las investigaciones era descartar que Masood integrara una estructura terrorista más amplia por lo que investigaba su círculo íntimo. Las primeras informaciones policiales arrojan que el hombre residía en el condado de West Midlands, donde está situada la ciudad de Birmingham y en la que alquiló el vehículo que usó para perpetrar los hechos.
De hecho, la Policía capturó ayer en Birmingham a 7 personas sospechosas de estar vinculadas al atentado, según dijo ayer el comisionado adjunto de la Policía Metropolitana, Mark Rowley. Masood atropelló a varios peatones sobre el puente Westminster, luego se bajó y corrió hacia el Parlamento donde según testigos, acuchilló a uno de los policías que custodiaban el Palacio legislativo. El agente, que pese a las acciones de auxilio murió en el sitio en el que vigilaba, fue identificado como Keith Palmer, de 48 años.
Además de Palmer, murieron Aysha Frade, de 43 años, profesora de español en Londres; Kurt Cochran, un turista estadounidense (cuya mujer sigue en el hospital); y un hombre de 75 años al que le ha sido retirado el “soporte vital” y cuya identidad aún no ha sido facilitada. El quinto fallecido es el propio atacante. El número de heridos se mantiene en 40.
Vigilia por las víctimas Centenares de londinenses acudieron con velas y ramos de flores a un acto de homenaje convocado por el alcalde de la capital británica, Sadiq Khan, que mostró su solidaridad con los afectados y llamó a los ciudadanos a no dejarse “intimidar” por el terrorismo.
Durante una jornada de duelo en Londres, se multiplicaron las ofrendas al pie del Big Ben y otros puntos donde el miércoles se vivieron escenas de pánico. Las redes sociales, durante toda la tarde, se llenaron de mensajes de solidaridad con la etiqueta (“No tenemos miedo”). Mientras que la primera ministra May intentaba animar a sus compatriotas. “Avanzaremos todos juntos. Nunca nos rendiremos ante el terror. Y nunca permitiremos que las voces del odio y el mal nos separen”, concluyó May.
Desde otros países han seguido llegando mensajes de solidaridad con Reino Unido. Los gobiernos de América pidieron ayer unidad en la lucha contra el terrorismo y manifestaron su solidaridad con el pueblo británico.
El ministro británico de Exteriores, Boris Johnson, aseguró ayer en la ONU que el mundo está unido hacia la derrota del terrorismo islámico. “Nuestros valores son superiores, nuestra visión del mundo es mejor y más generosa, y nuestra voluntad más fuerte”, afirmó. -EFE.