“El Salvador necesita un trabajo sin descanso para superar esta situación y en eso estamos…”.
Así expresó el Obispo Auxiliar de San Salvador, monseñor Gregorio Rosa Chávez, su voluntad de trabajo como Cardenal de la Iglesia Católica tras ser designado por el Papa Francisco.
.@Pontifex anuncia nuevo consistorio para el 28 de junio donde creará 5 nuevos cardenales. #España, #Estocolmo, #Suecia, #Laos y #ElSalvador
— ACI Prensa (@aciprensa) 21 de mayo de 2017
Lo que le pareció un “broma” al alba se convirtió en una santa realidad. “Fue una llamada desde España a las 5:00 de la mañana, de que habían escuchado la noticia del Papa a las 12:00 del día en Roma en el que se hacía mi nombramiento. Me tomó sorpresa, pensé que era una broma; después me di cuenta de que era verdad”, fueron las primeras palabras de monseñor Rosa Chávez a los periodistas en su oficina de la antigua parroquia de San Francisco, en la alameda Juan Pablo II y 2a. Avenida Norte.
Acababa de presidir unos bautizos y las llamadas se multiplicaban a cada momento, confirmando la buena nueva, que le alegraba, según expresó, en un país “donde las buenas noticias escasean”.
Sin embargo, está convencido de que su designación, precisamente en el centenario del natalicio de Monseñor Óscar Arnulfo Romero, “impulsa el proceso para lograr un país en paz y en justicia” y la posibilidad de que el Beato sea canonizado.
De 74 años de edad, Rosa Chávez será el primer purpurado salvadoreño y el primero también en ostentar el cargo y ser Obispo Auxiliar a la vez, lo cual significa que el báculo de la Arquidiócesis de San Salvador seguirá en manos del Arzobispo, monseñor José Luis Escobar Alas, según explicaron fuentes eclesiásticas.
Felicidades a Monseñor Gregorio Rosa por su próximo nombramiento como cardenal, el primero para nuestro país. pic.twitter.com/AtIOHOaPsU
— Arzobispado SS (@arzobispadoss) 21 de mayo de 2017
A pesar de que su nombramiento de cardenal lo pone en un nivel privilegiado dentro de la jerarquía de la iglesia Católica, el obispo, Rosa Chávez, lo ha recibido con mucha humildad, “todo sigue igual, aquí no cambia nada, solo que tendré tareas que aún no conozco”, afirmó el religioso.
Será una especie de “primus inter pares”, es decir, tendrá una precedencia o primacía de honor, pero el gobierno de la arquidiócesis seguirá igual.
Técnicamente, los cardenales ni siquiera han de ser obispos, basta con que sean sacerdotes, explica el sitio católico Aleteia.
La información de la Iglesia no puede entenderse desde una lógica política, decía el Papa Francisco horas después de su designación como Sumo Pontífice en un encuentro con la Prensa. No se trata de un agravio ni a monseñor Escobar ni a monseñor Sáenz Lacalle, obispo emérito de San Salvador.
“Es una cosa que no merezco, y que Dios ha querido regalarme a mi este día”, dijo Rosa Chávez a los periodistas la mañana del domingo.
Se trata ante todo de un reconocimiento a una persona, y a lo que esa persona puede servir a la Iglesia como miembro del colegio cardenalicio acompañando al Papa actual, y eventualmente, a otros…
Una vez consagrado cardenal, en un consistorio o asamblea de cardenales convocada por el Papa para el 28 de junio, el obispo tendrá funciones como apoyar al Pontífice en el gobierno de la Iglesia, dirigir un parroquia en Roma, participar en la eventual elección papal y hasta eventualmente ser elegido.
Para su nombramiento pesó una vida eclesiástica de más de cuatro décadas que incluye un trabajo de la mano con el Beato Romero, el haber sido rector del Seminario San José de la Montaña, su activa participación en el mundo académico católico como conferencista y en los círculos vaticanos y ser promotor de la canonización de Romero.
Las reacciones de las máximas autoridades de la iglesia católica no se hicieron esperar el domingo.
El embajador del Vaticano en El Salvador, monseñor Léon Kalenga Badikebele, dijo que el nombramiento de monseñor Rosa Chávez era un regalo para el país, pues los demás países centroamericanos como Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá tenía cardenal, faltaba El Salvador.
“Esto es de mucha alegría y alabanza, la decisión salió del Papa, es un regalo inmenso”, afirmó Badikebele.
Entre tanto monseñor José Luis Escobar Alas durante celebración ayer por la tarde en la cripta donde descansan los restos de monseñor Oscar Arnulfo Romero manifestó que la iglesia salvadoreña está “sumamente contenta y se ha recibido la noticia con inmensa alegría, porque es la más grande noticia que nos podría dar hoy”.
Escobar Alas dijo que les alegraba mucho que el Papa este domingo lo haya publicado la creación de los nuevos cinco cardenales y dentro de ellos está monseñor Gregorio Rosa Chávez.
“Es una bendición para él y para nuestro país, por eso nos alegramos todos, incluso más allá de nuestro país, para los obispos de Centroamerica y toda Latinoamérica”.
El arzobispo capitalino, dijo que monseñor Rosa Chávez es muy conocido en el Consejo Episcopal de América Latina y en los obispos de Centroamérica.
“El Papa ha sido muy bondadoso al poner su mirada en monseñor Gregorio y también en El Salvador, el país de monseñor Romero , estamos muy agradecidos con Dios y con el Papa, estamos muy felices con este nombramiento porque tenemos un cardenal en nuestro país”, puntualizó el arzobispo de San Salvador.