Al menos 10 personas han muerto y cerca de 38 resultaron heridos en dos explosiones tras un partido de fútbol en Estambul esta noche, de acuerdo a agencias internacionales .
El ministro del Interior, Süleyman Soylu, sostuvo que se trata de un ataque "planificado con traición" por medio de un coche bomba. Una detonación se produjo cerca del estadio Vodafone Arena de Besiktas, junto al fondo oeste, donde había un puesto de policías antidisturbios. Según Soylu, se sospecha que un suicida se inmoló con explosivos en el parque de Maçka, pocas decenas de metros al noroeste del campo de fútbol.
Los estallidos, que ocurrieron una hora después del pitido final de un Besiktas - Bursaspor, se oyeron desde la plaza de Taksim, centro de la ciudad, a 500 metros del césped. La confusión reinó en los minutos iniciales. Numerosos policías trataban de evacuar a los nerviosos espectadores que quedaban mientras acordonaban la zona.