MASSACHUSSETTS. Luke padece síndrome de Down, problemas del corazón y epilepsia. Por eso su cuidadora debía ser una persona con conocimientos especiales para manejar cualquier crisis que pudiera sobrevenirle.
Pero lejos de mostrar paciencia, comprensión y cariño hacia el niño, Lillian D. White, la mujer que los padres de Luke contrataron resultó ser un monstruo.
Según informa el periódico inglés Mirror, la cuidadora de Luke se dedicaba a pegarle, zarandearle e insultarle a la mínima ocasión que no hiciera caso. Las grabaciones de los maltratos, extremadamente duras, han servido para desenmascarar a la mujer, que ha sido denunciada y se enfrenta ahora a una pena de cárcel por maltrato a un menor con necesidades especiales.
En el vídeo se puede ver a la niñera arrastrando al pequeño Luke por todo el salón, inmovilizando su cabeza con el trasero para ponerle unos pantalones, retorciéndole brazos y piernas e insultándole continuamente.
Ahora Lillian D. White está pendiente de juicio, que se celebrara en la ciudad de Lexington, en Massachusetts (Estados Unidos). La Fiscalía acusa a la niñera de agresión a menores en segundo grado.