ITALIA. Fíjese bien en el árbol que aparece en la fotografía de esta nota. Se trata de un precioso ejemplar, grande y majestuoso, pero... ¿percibe que hay algo extraordinario en él? Efectivamente, no se trata de un solo árbol, sino de dos. De la parte superior del que actúa como base emerge una segunda planta, de tronco mucho más fino y copa considerablemente más verde. Lo que está viendo es el increíble "árbol doble" o bialbero de Casorzo, un extraño pero hermoso capricho de la naturaleza.
Encontramos más información sobre él en el blog Oddity Central. Si quiere verlo en directo tendrá que viajar a Italia, a la montañosa región de Piamonte, situada en el noroeste del país. En las proximidades de la pequeña localidad de Casorzo se alza este árbol que atrae a numerosos turistas, deseosos de ver de cerca un fenómeno muy poco común. De hecho, son contados los casos de árboles de gran tamaño creciendo sobre otros en el mundo y este es uno de los más espectaculares por las dimensiones de sus piezas.
Las plantas no parasitarias que crecen en árboles se llaman epífitas y generalmente son muy pequeñas: hablamos de helechos, musgos, líquenes y similares. Nada que ver con el bialbero de Casorzo, en el que se han unido una morera y un cerezo, en la base y en lo alto respectivamente. No sólo sorprende su tamaño, sino la excelente salud de los dos árboles, que parecen convivir a la perfección, sin que ninguno prive al otro de los recursos necesarios para mantenerse en buen estado.
Lo normal en esta clase de situaciones es que el árbol de la parte superior dure poco tiempo, al no tener un acceso sencillo a la tierra; o que el de la parte inferior acabe rompiéndose, al ser atravesado por las raíces de su compañero y quedar debilitado su tronco. Ninguna de las dos cosas ha sucedido con este ejemplar. Las raíces del cerezo ocupan el espacio justo dentro del tronco de la morera, incluso parece que con el tiempo han terminado por darle consistencia.
¿Cómo es posible que esta maravilla haya llegado a producirse? Esa es la pregunta del millón: nadie tiene muy claro cuál es el auténtico origen del bialbero de Casorzo. La teoría más extendida entre los habitantes de la zona es que un pájaro podría haber dejado caer una semilla de cereza sobre la morera, con tanta fortuna que acabó "fabricando" un árbol doble. Una pieza formidable, con ramas de más de cinco metros de diámetro que le otorgan una apariencia imponente.