El comisario de la Policía Metropolitana de Londres, Bernard Hogan-Howe, afirmó ayer que el nivel de amenaza de un ataque terrorista en el Reino Unido es “severo”.
Esto a raíz de los recientes ataques producidos en Alemania y Francia, los cuales se ha atribuido el grupo terrorista Estado Islámico (EI).
“Siento y entiendo ese temor. Como oficial de policía a cargo de evitar un ataque, sé que quieren que les de garantías. Lo siento, pero no puedo hacerlo por completo”, escribió Hogan-Howe en un blog que posteriormente fue retomado por medios británicos.
Según el oficial de policía, los niveles de tolerancia y los valores de la sociedad británica son generadores de las hostilidades de estos grupos radicales islamistas.
Hogan afirmó que el nivel de amenaza “severo” se ha mantenido en pie durante los últimos años, desde el asesinato del soldado Lee Rigby en mayo de 2013 a manos de dos fundamentalistas en el distrito londinense de Woolwich.
También advirtió que la cuestión es discutir “cuándo” se daría un ataque y no si este será o no.
Pese al alto nivel de riesgo, Hogan-Howe resaltó que la estrecha coordinación entre el servicio policial y las unidades de inteligencia británicas, además de la geografía británica complican un posible ataque.
Ben Wallace, ministro de Seguridad del Reino Unido, ha sostenido reuniones con los propietarios y operadores de los principales centros comerciales británicos para discutir sus planes de seguridad.
Tras los eventos en Alemania y Francia, “el Gobierno busca asegurar que los centros comerciales y estadios deportivos donde hay grandes multitudes tienen el respaldo que necesitan”, comentó.