NIAMEY. Treinta y cuatro cadáveres de inmigrantes nigerinos, 20de ellos niños, fueron encontrados muertos por deshidratación el pasado fin de semana en una zona desértica de Níger, según informó a Efe el alcalde de la región, Abdurahman Maouli.
"Los cadáveres se encontraban en un estado de "descomposición avanzada", explicó Maouli, quien añadió que las víctimas son casi todos originarios de Kantché, en el sureste de Níger, y fueron hallados en la región de Assamaka, en el norte del país, junto a la frontera con Argelia.
"Las víctimas murieron a causa de la sed y el hambre, probablemente entre el 6 y el 12 de junio, tras haber sido abandonados por la noche por los pastores que les transportaban", indicó Maouli.
El alcalde nigerino explicó que los pastores aprovechan la noche para engañar a sus "clientes", que perciben desde lejos las luces de una ciudad, habiéndoles creer que están cerca de su objetivo y que lo pueden alcanzar andando, pero luego los abandonan.
El Ministerio de Interior de Níger informó a través de un comunicado, difundido por la radio gubernamental, que una veintena de niños se encontraban entre los muertos.
El resto de víctimas son nueve mujeres y cinco hombres, de los que solo dos han sido identificados, uno de ellos ciudadano de Níger y el otro de Nigeria.
Este incidente se produjo en la misma zona donde al menos 92 inmigrantes nigerinos murieron de sed y hambre en octubre de 2013, después de que los vehículos que les transportaban quedaran averiados en Argelia
?Níger es parte de una de las principales rutas de migración entre el África subsahariana y Europa, sobre todo a Italia. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) estima que unas 120,000 personas atravesaron la región nigerina de Agadez durante 2015. Según la organización, el 60% de los migrantes que viajan a través de Libia para llegar a Europa por el Mediterráneo central "pasan a través de Níger."
Argelia se ha convertido en un destino principal para los inmigrantes africanos, debido al caos en el que está inmerso Libia y ha recibido en los últimos años a miles de inmigrantes, principalmente de Mali y Níger, país con el que comparte una larga frontera.