El papa Francisco dijo esta mañana a los adolescentes que la felicidad no se puede descargar como si se tratara de una aplicación móvil.
El pontífice usó la referencia al dirigirse a los jóvenes de 13 a 16 años de edad que viajaron a Roma para un fin de semana dedicado al Año Santo.
Durante su homilía de hoy en la plaza de San Pedro, el papa dijo a unas 100.000 personas que "la felicidad no tiene precio" y que "no es una app que se puede descargar en sus teléfonos. La última actualización tampoco les podrá traer libertad ni la grandeza en el amor".
Un día antes, en un mensaje de video a los adolescentes reunidos en un estadio en Roma, Francisco comparó el estar desconectado de Dios por la falta de amor con el estar en un sitio donde no hay recepción de telefonía celular.
Después de la misa, decenas de sacerdotes vestidos de blanco rodearon a Francisco y muchos de tomaron fotos con él.
También reza por liberación de cristianos secuestrados
El pontífice también rezó por la pronta liberación de los cristianos secuestrados en Siria. Francisco expresó su preocupación por su largo cautiverio y le pidió a la gente que recuerde a todos los demás secuestrados en el mundo.
El papa dijo esperar que Dios, "misericordioso", toque los corazones de las personas en Siria que han secuestrado a fieles católicos y ortodoxos, entre ellos obispos y sacerdotes, para que los cautivos sean liberados pronto.
Dijo que está muy preocupado por los cautivos en Siria, que está devastada por cinco años de guerra civil.
El papa no citó a ninguno de los rehenes por su nombre en particular. También pidió orar por todas las personas que se encuentran secuestradas en el resto del mundo.