Ucrania, Bielorrusia y Rusia conmemoran hoy por separado el 30 aniversario de la catástrofe de Chernóbil, la mayor en la historia de la explotación civil de la energía atómica. Los tres países eslavos afectados recuerdan la tragedia del 26 de abril de 1986, cada uno por su cuenta, desde sus distintas coordinadas políticas y económicas.
En Ucrania ha habido varias vigilias celebradas en la madrugada para rendir homenaje a las víctimas y "liquidadores", las personas que ayudaron a paliar los efectos de la emisión masiva de radiación.
A la 1:23 am de hoy (hora local), exactamente la hora en que tuvo lugar la explosión del reactor número 4 de la central de Chernóbil el 26 de abril de 1986, sendas ceremonias comenzaron en una iglesia de Kiev y en otra en la ciudad de Slavutish en recuerdo de la catástrofe.
Vea la galería de fotos en el siguiente enlace: Conmemoran 30 años de la tragedia de Chernóbil
Slavutish, situada a 50 kilómetros de la central pero fuera de la "zona de exclusión" de 30 kilómetros ordenada en torno al epicentro del desastre, fue creada para acoger a algunos de los habitantes evacuados de las ciudades más afectadas, como Pripiat, así como a los trabajadores que siguen trabajando en el recinto atómico.
El presidente ucraniano, Petró Poroshenko, es esperado hoy en la "zona de exclusión" y en la central de Chernóbil, precedido por las protestas de "liquidadores" que exigen en Kiev que se les devuelvan las ayudas y beneficios sociales perdidos en los últimos años.
Antes, en el complejo de arte nacional "Museo Mystetskyi Arsenal" de la capital ucraniana, Poroshenko asistió a otro acto dedicado a la tragedia, en el que se mostró un cuadro de la artista Maria Primachenko dedicado a su sobrino Valeri Jodemchuk, el único operador de la planta nuclear que murió la noche de la explosión.
Un memorial dentro de la central de Chernóbil recuerda a este trabajador fallecido.
El peor accidente nuclear de la historia, en la central de Chernóbil, a 120 kilómetros de Kiev, liberó a la atmósfera más de 50 millones de curies de radiación y contaminó vastas zonas de este país, de Bielorrusia y de Rusia.
De la "zona de exclusión" creada en torno a la siniestrada central, fueron evacuadas más de 135,000 personas los días posteriores al accidente, de las ciudades de Pripiat, que contaba con 50,000 habitantes, Chernóbil, con 12,000, y pueblos cercanos.
Unas 600,000 personas, a las que se suele llamar los "liquidadores" de Chernóbil, fueron enviadas a luchar contra el fuego y a limpiar la peor parte de la contaminación de la planta. La explosión inicial del reactor mató a al menos 30 personas y expuso a millones más a un nivel de radiación peligroso.
El recuento final de muertos está sujeto a especulaciones por los efectos a largo plazo de la radiación, pero varía entre los 9.000 estimados por la Organización Mundial de la Salud hasta los posibles 90.000 del grupo ambientalista Greenpeace.
Treinta años después, muchos no pudieron contener las lágrimas al llevar flores y velas a un monumento dedicado a los trabajadores que murieron en la explosión. Algunos de los exliquidadores sobrevivientes se vistieron con batas y capas blancas para la ceremonia, igual que las que llevaron después del desastre.
Andry Veprev, que trabajó en la planta durante 14 años antes de la explosión y ayudó a limpiar la contaminación, dijo que los recuerdos del caos de 1986 seguían vívidos.
"Estoy orgulloso de aquellos hombres que estuvieron aquí conmigo y que ahora ya no están aquí", dijo.
Lidia Malysheva, una exempleada de Chernóbil cuya familia fue reubicada de Pripyat a Slavutych, dijo que los recuerdos del desastre están grabados en la mente de los sobrevivientes.
"Cada años venimos aquí y cada año parece que el desastre fue ayer", dijo. "La gente dice que han pasado 30 años, pero no puedo creerlo".
Rusia
En Rusia, una quincena de regiones resultó afectadas por la nube radioactiva de Chernóbil. La radiación sigue siendo muy elevada en puntos que el Gobierno ruso ha excluido de la lista de zonas más afectadas, según dijo Alla Yaroshínskaya, exdiputada de la URSS y autora de numerosas obras sobre Chernóbil. Según Yaroshínskaya, un total de 554 poblaciones fueron eliminadas de la lista de territorios afectadas en 2015, lo que significa la pérdida de las prestaciones que recibían los residentes. Yaroshínskaya cita la localidad de Novozyvkovo y otras zonas de Briansk, una provincia donde ha habido manifestaciones en contra de la decisión gubernamental. En 1997 los habitantes de la región se querellaron cuando las autoridades intentaron rebajar el estatus de las regiones afectadas y los tribunales les dieron la razón. Ahora se la han negado, afirma Yaroshínskaya. En Moscú, el presidente de la asociación de Chernóbil, Andréi Grushenkov, manifestó que las autoridades municipales quieren echar a la asociación Chernóbil Moscú (con 12.500 socios), de los locales que actualmente ocupa gratuitamente en virtud de un acuerdo con el anterior alcalde de la capital. Una parte de las prestaciones de las que disponían los ciudadanos rusos afectados por Chernóbil fueron abolidas a partir de 2004.
Bielorrusia
Proporcionalmente, Bielorrusia fue el país más afectado por el accidente (el 23% de la superficie del país, especialmente las regiones de Gómel y Magiliov, donde vivían 2 millones de personas). En la zona contaminada a fecha de 1 de enero vivían 1,4 millones de personas (el 12% de la población de la república), según la agencia rusa Tass. No obstante, Bielorrusia es el país que parece más dispuesto a archivar el accidente: construye actualmente su primera central nuclear con tecnología rusa y proyecta restablecer la producción agrícola en región afectada por la catástrofe, según dijo este lunes en Minsk el ministro de Exteriores, Vladímir Makei. En opinión del ministro, “se puede llorar, sufrir y quejarse, pero hay que tratar de cambiar la situación” y elegir entre organizar la ayuda humanitaria entre los afectados o “intentar recuperar esta tierra para vivir y cultivar productos aptos para el consumo”.
Bielorrusia ha acumulado un conocimiento y una información únicos en la superación de catástrofes semejantes a la de Chernóbil, según su presidente, Alexandr Lukashenko.
En el siguiente vídeo de la BBC un empleado de la planta recuerda esa pesadilla.