Duan, un joven chino, fue condenado a pasar tres años en prisión luego de vender a su hija de 18 días de nacida para poder comprar un iPhone y una motocicleta.
Duan, quien reside en Ton’Gan, provincia de Fujian, obtuvo 3 mil 500 dólares en la venta (23,000 yuans), la transacción la realizó a través de la red social QQ.
Según el diario británico The Mirror, ambos padres no querían quedarse con la bebé por motivos económicos. Mientras la mujer laboraba en distintos empleos; su pareja, supuestamente, se dedicaba a realizar los trámites por internet para vender a la niña.
De acuerdo con el medio, la muchacha, identificada como Xiao Mei, no sabía de las intenciones de su pareja de vender a la recién nacida. Supuestamente, dijo a la Policía que “yo fui adoptada, y mucha gente en mi pueblo manda a sus hijos a otras personas para que los críen. Yo realmente no pensaba que esto era ilegal”. Esto no la salvó de una sentencia y fue condenada a 2 años y medio en prisión.
El hombre que compró a la niña se la entregó a su hermana. La pequeña permanece con la mujer en tanto las autoridades establecen el curso de acción.