José Melara, un joven estudiante de 16 años, se dirigía junto a su madre a hacer unas compras cuando desconocidos lo interceptaron para robarle sus pertenencias y luego asesinarlo en el cantón Quezalapa, del municipio de Panchimalco, San Salvador.
Según informó la Policía Nacional Civil (PNC), el primer intento de robo salió frustrado porque Melara logró escapar, sin embargo, 25 metros después, otros pandilleros que se escondían en un árbol le dispararon en al menos 13 ocasiones.
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El joven era estudiante de primer año del Instituto Nacional Técnico Industrial (INTI).
La PNC determinó que el motivo del asesinato fue por robo, luego de que la madre de la víctima, que salió ilesa, relatara que les habían quitado celulares y dinero.
Los jóvenes siguen siendo víctimas de la violencia que se vive en el país y según las autoridades, la inseguridad que enfrentan los adolescentes obliga a que abandonen sus estudios académicos.
Al cierre del 2016, más de 14 mil estudiantes desertaron en El Salvador por motivos de inseguridad, informaron autoridades policiales junto al Ministerio de Educación.
En ese año, la Policía registró la muerte de 71 estudiantes y nueve profesores.
