Dos dirigentes juveniles del partido opositor venezolano Primero Justicia: José Sánchez y Alejandro Sánchez, fueron detenidos ayer por las autoridades acusados de estar involucrados en “actos terroristas y atentados contra la paz del país”, informó el ministro del Interior de Venezuela, Néstor Reverol.
Sin embargo, la agrupación política denunció que se trató de un “secuestro” de sus dos miembros y responsabilizó a Reverol de ese hecho.
Una serie de manifestaciones opositoras convocadas desde el 1 de abril han terminado en violentos enfrentamientos con las autoridades, que las dispersan con gases lacrimógenos, balas de goma y chorros de agua.
La oposición exige la destitución de los magistrados del Máximo Tribunal de Justicia, a los que acusa de servir al gobierno, y que se fije un cronograma electoral.
Pero para las autoridades venezolanas del régimen de Nicolás Maduro “es condenable cómo la derecha venezolana utiliza la violencia criminal para sus propósitos golpistas”, indicó Reverol, quién aseguró tener “valiosos elementos de prueba que comprometen a dirigentes de la derecha con los actos terroristas”.
El jefe de inteligencia, Gustavo González, informó hace una semana que han sido capturados los “primeros cabecillas” de una “célula fascista terrorista” liderada por el excandidato Henrique Capriles.