Alcaldes le apuestan a un relleno eficiente y amigable con el ambiente

El Proyecto comenzó a ejecutarse en 2003 bajo el apoyo de la oficina japonesa  a través de la cooperación técnica.

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La cooperación japonesa apoya el proyecto de relleno sanitario de La Unión a través de capacitaciones al personal que trabaja en él. También realiza acciones de concientización entre escolares con el fin de promover el reciclaje.

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09 February 2017

LA UNIÓN.  Para hacer el relleno sanitario de La Unión,  en todo su mecanismo de procesamiento de desechos, amigable con el medio ambiente, la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) apoya a  con capacitación técnica a la Asociación de Intermunicipal de Municipios del Norte de La Unión (Asinorlu). La cooperación se viene realizando desde 2003.

Enrique Turcios, operador del lugar, señaló que “el relleno cuenta con estándares de calidad que permiten que no haya contaminación del ambiente porque tenemos una laguna de lixiviados donde son tratados”.

JICA ha apoyado a través de voluntarios que conocen sobre el manejo de desechos, por lo que en el última año la voluntaria Mika Tanaka ha sido la designada y ha emprendido acciones como la seguridad ocupacional de los empleados del relleno, proporcionando la indumentaria para la ejecución de las labores sin comprometer su integridad física.

Además ha dado capacitación y concienciación sobre reciclaje de desechos a los estudiantes de escuelas públicas de 26 municipios que hacen uso del relleno sanitario en La Unión.

Empleados salvadoreños  han viajado a Japón para aprender  sobre la gestión integral de residuos sólidos y han replicado sus conocimientos con personal de las alcaldías hondureñas de Guisayote y Valle de Sensenti, en Ocotepeque.

Margarito Pérez, alcalde de Lislique y parte de la Asinorlu, explicó que “desde el 2002 comenzamos con la idea de hacer nuestro propio relleno sanitario para tratar los desechos sólidos, se concretó en 2003 y desde  entonces hemos recibido el apoyo de Japón a través de JICA”.

Mencionó que la cooperación es técnica y con ello han logrado hacer del relleno un lugar más amigable para que no contamine el medio ambiente.

El relleno sanitario recibe  mensualmente un promedio de 1,200 toneladas de basura.

Turcios explicó que en el relleno  los desechos son compactados y cubiertos; además, abajo de  la celda hay un sistema de impermiabilización que evita que los líquidos que emanan de la descomposición de los desechos se filtren a la tierra.

Los lixiviados son acumulados en una laguna, luego son tratados y usada en el mismo procesamiento de los desechos.

El objetivo de la cooperación técnica de Japón es que el relleno sea utilizado por muchos años.