“Si los niños no pueden llegar a Santa, Santa puede llegar a ellos”

Einar Sveinson es un islandés nombrado el verdadero “Santa Claus” que lleva alegría a los niños.

descripción de la imagen

Este el rostro que llena de alegría desde hace 15 años a los pacientes ingresados del hospital Bloom.

Por

23 December 2016

Einar Sveinsson, de 71 años, todavía recuerda  con emoción  su primera visita al hospital Bloom: “estoy con Santa”,  fueron las palabras de  una niña ingresada por quemaduras en el hospital. Esas palabras llenas de emoción y alegría  son las  que  quedaron grabadas en su memoria desde diciembre del 2000 que decidió convertirse en Santa Claus para llevar diversión a los pacientes del hospital nacional  pediátrico.

Vea galería completa de imágenes Santa Claus en El Salvador

“Me dicen el verdadero Santa”, sostiene Einar Sveinsson, uno de los hombres que durante la época de fin de año lleva maratónicas jornadas de alegría y diversión para las familias salvadoreñas. 

El traje rojo con bordes blancos, al igual que su gorro, que acompañan al cinturón y botas negras, que lo caracterizan como Santa Claus, es solo un distintivo para el show. 

Puedes leer: Así es la Navidad en los pueblos de San Vicente

Detrás de esa vestimenta se encuentra un personaje peculiar, originario de Islandia, quien ha decidido echar raíces en El Salvador por el amor que le tiene a los niños. 

Sveinsson es buscado por grandes empresas para realizar musicales y montar pequeñas obras teatrales, de su autoría. En compañía de sus duendes, asistentes y la Señora Claus, Santa lleva el mensaje de la unión, la felicidad y el amor arriba del escenario. Pero tras el telón, al despojarse del pesado y cálido traje, el ánimo de llevar felicidad se lo deja puesto.

Tras escribir y protagonizar una miniserie de televisión llamada la Página Navideña de Santa, y saltar a la fama, recordó la frase de una niñita que, dentro de la dramatización, le expresa su tristeza por que hay muchos niños enfermos.

Ahí nace la idea, “si los niños no pueden llegar a Santa, Santa puede llegar a donde están ellos”. Y así fue la primera Noche Buena que el europeo decidió visitar a los pacientitos, hace 15 años. 

Por esa razón, en diciembre de 2007, Sveinsson fue declarado por las autoridades del Bloom como primer embajador de los niños del hospital. 

Te puede interesar: Árboles y Navidad a la salvadoreña

 Actualmente tiene 71 años, pero su memoria está tan fresca como la de aquel muchacho de 23 años que llegó por primera vez a tierras salvadoreñas acompañando a su padre en un viaje de trabajo.  “Solo venía por diez días... y nunca regresé a mi país”, recuerda Einar.

Llegó en 1968. Desde entonces se instaló en San Salvador, aunque también visita constantemente Honduras y Guatemala.

Con más de la mitad de su vida con su domicilio en Centroamérica, el europeo, además de aprender a hablar español, se acostumbró a la cultura, al clima... al ajetreo.  

“Fue un cambio de vida, pero una vida mucho más interesante, yo diría”, expresa.

Sostiene que en su país de origen “no tienes que preocuparte por nada, desde que tu naces hay seguridad social gratis, educación gratis hasta la universidad; es decir, la patria te chinea. Entonces, yo aquí aprendí a luchar, soy muy activo”.

Al consultarle ¿hasta cuándo piensa hacer esto?, el carismático Santa contesta: “Es que no puedo dejarlo, no pienso dejar de hacerlo”.

Fue en el año de 1999 cuando un viaje a sus tierras de origen lo motivaron a cambiar el rumbo de su vida.

Esveinsson es un empresario que nació en Islandia y es el Embajador de los niños en el hospital Bloom desde el 2007.