LA UNIÓN. Desde el jueves 27 de octubre, los vendedores informales que estaban ubicados en la calle peatonal, frente a la parroquia San Carlos Borromeo, en la cabecera, comenzaron a desarmar los puestos provisionales que la comuna había avalado y cuyo permiso venció el 17 del mismo mes.
En el lugar había aproximadamente 50 vendedores informales, a los que se sumaban 15 mas dentro del parque central. Todos autorizados por la comuna.
Luis Ayala, jefe de la unidad Tributaria de la alcaldía, detalló que el tiempo se les terminó a los vendedores para comercializar en la peatonal e interior del parque.