Para esta mañana está programada una audiencia en la Cámara Segunda de lo Civil en el proceso por el supuesto enriquecimiento ilícito por más de 700 mil dólares que se sigue en contra del expresidente, Mauricio Funes, ahora asilado en Nicaragua.
A la audiencia de hoy, Funes no está obligado a comparecer para que el proceso continúe, pues el mismo seguirá su curso a una siguiente etapa sin su presencia, nada más que por sus abogados, coinciden expertos en la entrevista Frente a Frente de TCS, Francisco Bertrand Galindo y el analísta Óscar Godoy.
Galindo explicó los posibles escenarios de esta diligencia: Que la Cámara resuelva enviar el expediente de Funes y su familia a la Fiscalía para continuar el proceso, que lo incapacite para ocupar cargo público por diez años. Y si existieran suficientes pruebas del delito, el proceso continuaría para la extinción de dominio o la devolución del dinero no justificado al Estado.
De acuerdo con Galindo, el expresidente Funes no tiene cómo demostrar el ingreso de 700 mil dólares. "El expresidente Mauricio Funes no tiene como probar el origen de 700 mil dólares", reiteró.
En cuanto al asilo político otorgado por el gobierno de Nicaragua, los analista cuestionaron que el mismo partido oficialista haya recomendado a Funes a no regresar al país porque lo van a capturar y humillar.
Beltrand Galindo sostuvo que Funes no es perseguido político porque para que exista esa condición, el Gobierno de turno debería ser contrario a su simpatía, además la oposición no está en condiciones de poder causar problemas.
"No hay persecución política, al señor Funes no se le está persiguiendo políticamente, está al igual que otros está en un proceso de investigación de corrupción. En sus propias palabras (Funes) cuando se refirió a este tema sobre Francisco Flores dijo: La investigación por corrupción no implica persecución política", reiteró Galindo.
Además es el partido de él que lo llevó al Gobierno que está actualmente gobernando, tampoco va a poner en peligro su vida. El partido de oposición no tiene capacidad de perseguir a nadie porque para eso requiere tener la institucionalidad, lo que si fue persecución político fue lo que hizo Mauricio Funes contra el expresidente Flores y en el caso CEL Enel, aclaró.
Sin embargo Godoy sostiene que si hay persecución contra Funes: "Si hay persecución contra Mauricio Funes, lo persigue la Fiscalía, el sistema judicial, los que quieren transparencia".
En ese sentido sostuvo que el asilo de Funes en Nicaragua es más político que de su seguridad. "El asilo de ex presidente Funes es un acuerdo de políticos", haciendo alusión a que el FMLN intercedió ante el presidente Daniel Ortega para que se le diera el estatus.
Galindo aseguró que: "Lo de Mauricio Funes no es persecución política, en caso de expresidente Francisco Flores sí hubo persecución política", lo mismo en el proceso judicial contra los acusados en el proceso CEL ENEL.
Para el analista Oscar Godoy, para el FMLN podría ser mejor tener a Mauricio Funes en Nicaragua que en El Salvador tomando en cuenta los réditos políticos y la personalidad de expresidente que puede revelar hechos que en nada le beneficia al oficialismo.
"Puede ser más cómodo un Mauricio Funes vociferando afuera que dentro del país", sostuvo Godoy.
Pero hasta cuando Nicaragua puede tener a Funes en su país, sabiendo que en su país es requerido para que responda por los procesos civiles y penales que hay en su contra y que podrían requerir de su presencia.
Galindo sostuvo que la presión internacional ha demostrado en otros casos que los gobiernos han tenido que entregar a las personas que protegen en sus territorios.