Cinco supuestos pandilleros murieron este lunes por la mañana al enfrentarse a tiros con la Policía en Cojutepeque, en Cuscatlán.
De acuerdo con las autoridades el tiroteo se registró en caserío Los Marroquines, cantón La Palma cerca de las 5:00 de la mañana.
Vecinos manifestaron haber escuchado varias detonaciones, lo que causó extrañeza pues el lugar es “tranquilo”.
Sin embargo, la Policía afirmó lo contrario, al señalar que el sitio es asediado por diversos grupos de pandillas.
Luego del tiroteo, las autoridades iniciaron un operativo por tierra y aire (policías y militares) en el sector en busca de los implicados en este nuevo hecho.
El operativo fue reforzados por las unidades elite del Grupo de Reacción Policial (GRP) tras considerarlo de alto riesgo.
Como resultado de la búsqueda, las autoridades encontraron el primer cuerpo, más tarde ubicaron cuatro cadáveres en el fondo de un poza o quebrada.
El lugar de hallazgo está entre 100 y 150 metros de profundidad, afirmaron integrantes del Cuerpo de Bomberos de El Salvador, quienes participaron del proceso de recuperación de los cadáveres.
Desde tempranas horas, las autoridades: Policía, Fiscalía y Medicina Legal se internaron en la ladera para desarrollar el proceso de reconocimiento de los muertos.
Ayer por la tarde las autoridades no podían precisar si las víctimas perecieron directamente en el enfrentamiento o si murieron al caer en el barranco cuando escapaban de la autoridad.
La Fiscalía manifestó que serán la autopsia, la que determinará si los sujetos murieron por los disparos o fue por la caída.
Los sujetos ayer por la tarde no habían sido identificados al parecer por falta de documentos personales, tampoco les han calculado la edad.
Por lo inseguro del terreno, un grupo de las Fuerzas Especiales de Reacción e Intervención, conformadas por policías y solados.
Según la Policía, el lugar de ataque es utilizado de corredor o paso por diferentes grupos delictivos.
Ayer por la tarde las autoridades no reportaban capturas de los sujetos que habrían escapado y que sobrevivieron a la balacera.
En el rastreo por la zona las autoridades localizaron dos armas de fuego sin precisar el tipo o calibre al parecer utilizadas en el enfrentamiento por los implicados.
Registros de las autoridades revelan que hace un tiempo en el lugar se dio una masacre.
El lugar está situado de 20 a 30 minutos en vehículo yendo del centro de la ciudad de Cojutepeque.
La zona es escabrosa por lo que los grupos delictivos la usan para esconderse.