El programa de Becas FANTEL, que se creó a la sombra de la Ley del Fondo Especial de los Recursos provenientes de la privatización de ANTEL, por cerca de 14 años ha marcado la vida de muchos estudiantes con ansias de superación y quienes, tras alcanzar con esfuerzo la excelencia académica, no contaban con recursos necesarios para continuar estudios superiores.
Hasta el 31 de diciembre de 2015 la cifra de beneficiados alcanzó los 1,162 y en lo que va del 2016 se ha llegado a los 1,178, según explicó Francisco Marroquín, director nacional de Educación Superior del Ministerio de Educación (Mined).
Marroquín precisó que el programa, que es manejado por Fedisal apoyado en el Reglamento de la Ley de FANTEL para Becas de Educación Superior, aglutina tres subprogramas: el primero, Becas Señor Presidente, que se otorgan a los 14 alumnos que alcanzan la mejor nota en la Paes y tres que son propuestos por el Programa de Jóvenes Talento de la Universidad de El Salvador; el segundo, Becas Talento Salvadoreño, que se destinan a artistas, académicos e investigadores propuestos por las secretarías de Estado; y el tercero, Becas a la Excelencia, que cada año son sacadas a concurso público a través de los medios de comunicación.
El artículo 3 del mencionado reglamento establece que “el Programa se creó con la finalidad de contribuir al desarrollo del país mejorando el nivel de profesionalización de los salvadoreños, por medio de becas otorgadas a estudiantes y profesionales destacados para realizar estudios de educación superior en El Salvador o en el exterior, así como incentivar el talento, la disciplina, la excelencia y la voluntad de superación.”
Es por eso que, por ejemplo, los beneficiario de las becas Señor Presidente son los que obtienen la más alta nota a nivel nacional en la Paes y los 14 que logran la más alta a nivel de departamento.
Dsitribución de becas
Del total de becas que se otorgaron hasta 2015, el 24 % fueron para realizar estudios en instituciones de educación superior del exterior y 76% en centros del ámbito nacional. Además, el 82 % eran para carreras de grado y 18 % para postgrado, precisó el funcionario.
Entre los destinos hacia donde han partido los becarios están Estados Unidos, España, México, Costa Rica, Argentina, Francia y Alemania.
De acuerdo con lo establecido en la Ley del Fondo Especial el 20 % de los rendimientos que se obtienen del manejo de los fondos de la venta de ANTEL se destinan para financiar el programa de becas.
Marroquín señala que la decisión de crear el programa de becas ha sido lo más acertado, porque es de los pocos de ese nivel que hay en el país y a la hora de seleccionar a los jóvenes y siguiendo lo que establece el reglamento, no solo se toma en cuenta su alto rendimiento académico, sino también la condición económica y el género en función de dar igualdad de oportunidades.
Ana María Menjívar, coordinadora de proyectos especiales de la dirección de Educación superior, afirma que “ salvo las becas Megatec que el Ministerio de Educación financia no tenemos otro programa (a la altura del programa de becas FANTEL); bueno, la presidencia tiene un programa que se llama Programa Becas Presidencia de la República, pero es un programa que depende directamente de la presidencia y es más pequeño, no hay becas al exterior, solo FANTEL financia becas al exterior y eso es hablar bastante de lo que representa”.
Los estadísticos que proveyó Educación muestran que de la cantidad de becarios FANTEL acumulados hasta 2015 el 62 % se inclinó por carreras del campo de la Ciencia y Tecnología, mientras el 38% por carreras del campo social. El 60 % de los becarios han sido hombres y el 40 % mujeres.
El ingeniero Ramón Alberto Vega, uno de los miembro del Comité Consultivo de Becas FANTEL que representa al sector de la sociedad civil, señaló que este programa es sumamente importante para el país, “ya que es una herramienta de política educativa que facilita el acceso a los buenos estudiantes que quieren continuar con sus estudios en el nivel superior. Las becas son completas y el ámbito es tanto a nivel nacional como en el exterior.”
Vega sostiene que el requisito de la excelencia académica es bueno y muy importante factor, “si un alumno es excelente, tiene una disciplina de estudios, eso lo hace permanecer hasta culminar sus estudios”.
Según el miembro del Comité Consultivo el país tiene un gran beneficio con cada becario que se incorpora al mundo laboral local, especialmente los que han estudiado en el exterior con carreras que no son servidas en el país y por los conocimientos de avanzada que reciben.
Dados los beneficios que el programa deja Vega considera que “sería muy importante para el país reforzar los fondos destinados para estas becas, tal como han hecho otros países que han decido formar una masa calificada de profesionales en áreas estratégicas para el desarrollo económico y social. Estoy convencido que es una muy buena herramienta de política educativa que propicia una “masa crítica” de profesionales que permitirían aspirar al país a mejores niveles de competitividad”.