Todo está preparado en la Plaza de San Pedro para que la Madre Teresa sea proclamada santa, en la ceremonia más importante del Jubileo instituido por el Papa Francisco para recordar la necesidad de misericordia, la que buscaba transmitir la religiosa por las calles de Calcuta.
La ceremonia de canonización de este domingo será el evento más importante y con mayor simbolismo de este Año Santo y combinará la tradición del rito, con sus fórmulas en latín, con las más altas tecnologías y despliegue de medios para la transmisión del evento.
Su legado en El Salvador, el cuido de los desvalidos
La canonización de la Madre Teresa, que será la primera premio Nobel en subir a los altares de la Iglesia Católica, se ha preparado en el Vaticano con las misas en diferentes idiomas celebradas el viernes en la basílica de Santa Anastasia en Roma, donde fieles han podido venerar la reliquia de la beata que será trasladada al altar de San Pedro durante la ceremonia.
La habitación en la que falleció Madre Teresa https://t.co/vYfAFsmwGJ
— ROME REPORTS (@romereportsesp) 3 de septiembre de 2016
Además el sábado, el Papa Francisco celebró una audiencia con los operarios y voluntarios de la misericordia en la Plaza de San Pedro y recordó la importancia de esta canonización al invitar a imitar el ejemplo de Madre Teresa de Calcuta “para aliviar el sufrimiento del mundo”.
“Mañana (domingo), tendremos la alegría de ver a Madre Teresa proclamada santa. Este testimonio de misericordia de nuestro tiempo se añade a la innumerable lista de hombres y mujeres que han hecho visible con su santidad el amor de Cristo”, recordó el Pontífice.
Madre Teresa visitó El Salvador en julio de 1988
Y entonces pidió a los fieles imitar su ejemplo, y pedir “ser instrumentos humildes en las manos de Dios para aliviar el sufrimiento del mundo, y dar la alegría y la esperanza de la resurrección”.
La Madre Teresa de Calcuta con su labor de ayuda a los más pobres y desfavorecidos en las calles de Calcuta, pero también en todo el mundo con sus centros de las Hermanas de la Caridad, es para la Iglesia Católica el símbolo de lo que debe ser la misericordia sobre la que Francisco ha querido poner hincapié en este Año Santo.
El amor de Madre Teresa por los más necesitados la llevó a constituir más de 600 fundaciones de caridad en no menos de 120 países. En dichos centros de asistencia las religiosas de la caridad, atienden a ancianos, enfermos de VIH y toda clase de personas que, por diversas razones no tienen quien vele por ellos.