“Ver, oir y callar... o morir” advierte un rótulo pintado sobre una pared contigua al puesto de verduras donde ayer en la tarde fueron acribillados a balazos dos vendedores de cebollas y tomates frente al edificio 10 del Mercado Central, de San Salvador.
El hecho fue cometido aproximadamente a las 4:45 de la tarde, sobre la 7a. Avenida Norte y el pasaje Acosta, donde Luis Alonso B., de 54 años, y Ronal P. M., de 52, se ganaban la vida vendiendo cebollas y tomates al menudeo.
Ambas víctimas fueron conducidas al hospital Rosales pero uno de ellos murió en el trayecto, indicó una fuente policial, quien dijo no saber cuál de los dos hombres era el que había muerto.
En el lugar solo quedaron abundantes manchas de sangre, cebollas y tomates esparcidos y múltiples casquillos de pistola, al parecer .45 milímetros, con la cual atacaron a los vendedores.
Policías y militares que llegaron a custodiar la escena del crimen dijeron desconocer el por qué fueron atacados los comerciantes.
El sector donde ayer atacaron a los dos verduleros un lugar donde constantemente se registran asesinatos de vendedores, vigilantes o miembros de pandillas.
El Diario de Hoy publicó ayer que en el Centro Histórico de San Salvador han sido cometidos al menos siete homicidios a pesar del despliegue de más de medio millar de soldados y policías que, supuestamente, frenarían tales crímenes.