AHUACHAPÁN. Diecisiete locales de los 35 con los que cuenta la Plaza Comercial “Doctor Alfredo Espino”, ubicada sobre la 10a. Calle Poniente, en Ahuachapán, están cerrados porque sus arrendatarios optaron por regresar a las calles porque no ingresan clientes y sus ganancias han reducido.
Los pocos ingresos que obtienen no les alcanzan para cancelar impuestos, créditos y el sostenimiento de sus familias. Detallan que, en el interior de la plaza, al día apenas venden dos o tres dólares.
El mercado tiene un espacio techado donde la alcaldía esperaba instalar a 120 vendedores conocidos como canasteros y también luce vacío.
Los comerciantes afirman que el problema radica en que en las calles aún se mantienen muchos vendedores informales, por lo que las personas optan por adquirir sus productos con ellos y no ingresar a la plaza.
La vendedora de fruta y verduras, Yeni Cortez, lamentó que el sitio no atraiga a los usuarios a pesar de que es techado y cuenta con agua, energía eléctrica y sanitarios.
Recomendó a la alcaldía impulsar dentro de la plaza actividades para atraer clientes, entre ellas: contratar música en vivo, especialmente los fines de semana; incentivar con premios a los compradores, organizar un festival gastronómico con platillos típicos, ordenar las ventas al interior y la construcción de mesas para que la mercadería no este en el suelo.
La administradora de la plaza, Alicia de Magaña, expresó que el festival gastronómico lo tienen previsto después de las fiestas agostinas.
Mientras que las otras sugerencias expuestas por la arrendataria están en estudio de las autoridades para determinar si las implementan.
En relación a los arrendatarios que tienen cerrados sus locales, señaló que les pedirán que los utilicen o de lo contrario que los regresen a la alcaldía para entregarlos a otros vendedores.