Verdades y errores sobre el cultivo de árboles y plantas

Muchas veces, por ideas equivocadas, nos abstenemos de plantar un árbol o lo hacemos de forma errada. Toda planta toma bióxido de carbono, lo descompone y libera el oxígeno que respiramos. 

descripción de la imagen

Por

04 July 2016

Muchas personas creen equivocadamente que al sembrar un árbol, se corre el riesgo de que al crecer caiga y provoque desgracias o muerte. 

Es falso. Cada especie tiene sus propias características y lo importante es seleccionar las más adecuadas para cada lugar y si se plantan en zonas urbanas, se les debe podar periódicamente para evitar que caigan al recibir fuertes corrientes de aire o agua.

Las hay de raíces profundas o superficiales, de rápido o lento desarrollo, de follaje denso o limitado. Pero todos generan oxígeno, permiten infiltrar agua al subsuelo y evitan la erosión. Además generan micro climas agradables.

Arboles y agua

Sin árboles no hay agua. Es un hecho, de ahí la importancia de reforestar, especialmente las cuencas de ríos y lagos. Se debe hacer con las especies adecuadas, que tengan raíces profundas, sean perennifolios y resistentes a condiciones adversas. Un bosque o masa de árboles es el canal natural que tiene el agua lluvia para infiltrarse al subsuelo. En zonas sin árboles no existen manantiales ni ríos.

Desarrollo ambiental

Muchos creen que hay árboles que no sirven para nada. Es un error. Incluso especies que no brindan frutos y cuya madera es de pésima calidad, cumplen la función de crear microclimas agradables.

Un bosque es fuente de vida y un desierto es símbolo de muerte. A mayor cantidad de árboles en una zona, habrá mayor cantidad de especies animales y vegetales silvestres.

La fertilización

Existe la creencia de que para obtener altas cosechas en frutales, es indispensable el uso de fertilizantes químicos. Pero  las plantas existieron y pueden existir sin aplicación de agroquímicos. Con una selección adecuada de variedades, programas de fertilización orgánica y ahoyado, se le brinda a cada ejemplar los nutrientes adecuados para dar cosechas óptimas que tienen mayor demanda en gran parte de la población. El mejor abono es la biomasa de los vegetales. Todo lo que consume un árbol en su vida lo reintegra cuando muere y se descompone.

Una misma especie

Muchos piensan que un cultivar de forestales, para ser rentable, debe ser de la misma especie. Es un error. Un mono cultivo cansa el suelo y elimina la aportación de nutrientes de la diversidad de especies. Con asistencia técnica se pueden definir franjas de diferentes especies que liberen nutrientes distintos al suelo y que contribuyan a mantener el equilibrio de estos, en beneficio de todos los ejemplares cultivados. 

Es el caso de las leguminosas, que al descomponerse liberan nitrógeno o el cacao y otros, que tienen una función similar con el potasio. 

La formación técnica

Plantar un árbol es tan simple como abrir un agujero y colocarlo, Es una verdad a medias. Muchos dicen no contar con personal capacitado para establecer cultivares de árboles. Pero el conocimiento ancestral de quienes viven en el campo, le permite saber las bases para hacerlo. 

Basta definir las especies a cultivar y la distancia entre ejemplares, para dar las indicaciones básicas. 

Todo agricultor conoce la importancia de eliminar malezas antes de la siembra, la forma de hacer un hoyo de siembra. 

Posteriormente se deberán tomar en cuenta otros aspectos como la poda y ahoyado. 

Bolsas para siembra

Hay quienes creen que las bolsas en que se siembran arbolitos deben ser extremadamente grandes. 

Generalmente es un error, ya que a las dificultades para el traslado, se suma que si los arbolitos son muy pequeños, se pueden desprender del pilón. Por el contrario,  si la bolsa no es extremadamente grande, sino más bien adecuada a la especie, será más fácil su traslado. Recuerde que con técnicas especiales, hay variedades que se venden en tubete o a raíz desnuda y dan buenos resultados. De manera general, los arbolitos no deben tener gran desarrollo al ser trasplantados, ya que necesitarán mayor cuidado en los primeros días. Un árbol pequeño se adaptará de mejor manera al trasplante, siempre que se mantenga libre de malezas la zona.

Un plan de ahorro

Hay personas que buscan asegurar su jubilación, plantando árboles. Es una manera óptima de ahorrar.

Hay maderables que necesitan al menos 10 años para lograr un desarrollo óptimo. Si se siembran oportunamente, cuando el propietario llega a su edad de retiro laboral, tendrá una significativa fuente de ingresos que puede ser continua si se maneja un plan de siembra y poda permanente.

No hay pretexto para no sembrar una planta o un árbol. Hay especies que se adaptan al sol o a la sombra, que pueden cultivarse en el suelo o macetas, que tienen raíces profundas para plantar en parques o aceras, que son de alto o mediano porte. Simplemente hay que solicitar asesoría antes de sembrar.