José Antonio Hernández, de 24 años, fue asesinado ayer por la mañana, mientras trabajaba como ayudante de un vendedor de agua y refrescos, informó la Policía.
El incidente se produjo en la calle al cantón San Andrés del municipio de Monte San Juan, en Cuscatlán. El vehículo donde se conducían las víctimas fue ametrallado por un grupo de pandilleros que aparentemente se habían apostado en los costados de la calle.
La mayoría de disparos fue concentrado en la parte del acompañante, es decir, donde viajaba Hernández, por lo que la Policía sospecha de que el ataque iba dirigido hacia él.
El comerciante, quien manejaba el vehículo, resultó herido de bala por lo que fue llevado a un centro hospitalario de la zona.
Aunque no se tiene un móvil definido del ataque, las autoridades policiales presumen que pudo derivarse de lo que las pandillas llaman control del territorio.
Los informes de la Policía detallan que las víctimas residían en una comunidad con presencia de la mara Salvatrucha (MS) y que se internaron para distribuir las bebidas a las tiendas en un sector asediado por la pandilla 18.
Aunque las autoridades no descartan que Hernández haya sido confundido como pandillero rival, familiares de Hernández aseguraron que él no pertenecía a ningún grupo de pandillas y que solo se dedicaba a trabajar junto con el comerciante. Tampoco había recibido amenazas de muerte, aseguraron.