Técnicos del Gobierno ya advirtieron al Ejecutivo que un sistema mixto dejará a muchos trabajadores dependiendo únicamente de la pensión mínima. Un beneficio que, para colmo, corre el riesgo de no ser pagada debido a la mayor carga fiscal que creará esta reforma.
El documento “Diagnóstico y Evaluación de Escenarios” elaborados en 2014 además de señalar riesgos de reabrir un fondo de reparto detalló las desventajas que implica mantener un sistema mixto.
Del análisis de los técnicos del Ministerio de Hacienda, Banco Central de Reserva (BCR) y Superintendencia del Sistema Financiero (SSF) se puede concluir que las condiciones laborales del país no son aptas para mantener un sistema mixto.
“Como resultado de las características del mercado laboral salvadoreño... los salarios significativamente bajos por lo que un buen segmento de la población tendrá derecho únicamente a la garantía mínima del Estado”, señala el informe.
Pero el problema va más allá. Cerca del 70 % de los trabajadores dependerá de un Estado que quizá no tendrá dinero suficiente para pagar la pensión mínima, la única prestación a la que ellos tendrían derecho.
El análisis del documento señala que las finanzas públicas tendrán un leve alivio, pues reducirá su deuda con los actuales cotizantes y recibirá una parte de las cotizaciones mensuales.
Pero los técnicos señalaron, ya antes de que el Gobierno publicará la propuesta del sistema mixto, que ese alivio es solo temporal y en realidad complicará las finanzas públicas.
La causa es que el Gobierno asumiría la responsabilidad de pagar, desde el primer día de su jubilación, a todos los trabajadores que aportaron en el sistema mixto.
Meses después, las cifras que el ministro de Hacienda llevó a la Asamblea Legislativa ponen en perspectiva ese riesgo.
Según la presentación del funcionario, el Gobierno alcanzará su mayor déficit (dinero que necesita y no tiene) de pensiones en 2024 con $1,100 millones. Con el sistema mixto ese año lo bajará a $490 millones.
El problema es que a la larga el déficit anual empezará a subir. Hacia el año 2045 será mayor al que tendría con el sistema actual, alcanzando un faltante de $1,247 millones en 2060.
Por otro lado, Hacienda reconoce que aún con el sistema mixto la deuda seguirá creciendo hasta alcanzar cerca de $23 mil millones (70 % del PIB) en 2025.
La deuda y la falta de dinero revelan la fragilidad de la pensión mínima que el Estado promete al implementar un sistema mixto.
Las desventajas de un sistema mixto que registra el informe del Gobierno son:
Solo pensión mínima
Los técnicos consideraron que las condiciones laborales en el país, y los bajos salarios, dejará a muchas personas solo con la pensión mínima. Buena parte de los trabajadores no podrá tener ahorro adicional en una AFP.
Pensión sin base técnica
Existe el riesgo de que la pensión mínima sea establecida sin una base técnica (o dinero real). Esto porque el Gobierno será el responsable de reconocer ese beneficio básico a todos los trabajadores que coticen en el sistema.
Cambiará edad de retiro
Los gastos del fondo de reparto aumentarán con el tiempo por el aumento de edad en la mayoría de la población. Eso obliga a revisar requisitos como edad de retiro o cotización para equilibrar el pago de pensión básica.
Desequilibra las finanzas
El alivio fiscal que busca el Gobierno será mínimo y en realidad creará más desequilibrio pues las cotizaciones se dividirán entre AFP y fondo de reparto. El Estado aún así pagará a todos los trabajadores una pensión mínima.
Pleitos legales
El sistema mixto no funcionaria en el corto plazo pues la expropiación de ahorros puede generar prolongadas discusiones legales. El desarrollo de estos procesos retrasaría la medida y el traspaso de los ahorros al fondo público.
Uso inadecuado de dinero
Los técnicos insisten en que un fondo de reparto, aún si se mantiene junto a las AFP, crea el riesgo de que el dinero y las cotizaciones sean mal administradas o se utilicen para otros fines que desee el Estado.