El combate contra las pandillas y la criminalidad ha llevado a las autoridades a implementar nuevas medidas de seguridad.
Este miércoles, el vicepresidente de la República, Óscar Ortiz, sostuvo una reunión con el fiscal general, Douglas Meléndez, y los diputados de la comisión de Seguridad y Narcoactividad de la Asamblea Legislativa.
Uno de los puntos de agenda fue la puesta en marcha, la próxima semana, de la Fuerza Especial de Reacción Rápida 7/24, compuesta con militares y policías, y conformada por mil elementos, explicó Ortiz.
Esta, agregó, tienen como objetivo garantizar golpes hacia cabecillas y estructuras criminales del país.
El vicepresidente señaló que se construirá un “protocolo de actuación” con la Fiscalía, para que estos grupos cumplan sus funciones en el marco de la legislación.
Otro de los temas abordados fue la reforma al sistema penitenciario, que buscan poner en marcha los Centros de Atención Temporal, según Ortiz, para que los reos estén en una dinámica de rehabilitación, como el trabajo de un día para ahorrarse dos días de pena.
Dichos centros, manifestó el vicepresidente, no incluirá a pandilleros, ni a personas que han cometido delitos graves.
Respecto a las reformas en el Código Penal, Douglas Meléndez mencionó que estas pretenden llevar las leyes a la realidad salvadoreña.
Señaló que entre las propuestas realizadas por el Ministerio Público se encuentran las figuras del tráfico de armas, la movilización de los delincuentes utilizando vehículos y la receptación.
Recalcó, además, que la autoridad de capturar a menores de edad que delinquen, favorecía el accionar de la Fiscalía General.
Muertes violentas en Chalatenango
Mientras las autoridades informaban por horas de la tarde de ayer de las nuevas medidas, por la mañana, la Policía registraba el hallazgo de tres cuerpos en el cantón Guarjila, sector conocido como “Poza El Cajón” , en Chalatenango, informaron las autoridades.
Los cadáveres fueron localizados la noche del martes, pero por las condiciones de la zona, fiscales y Policía acordaron aplazar la inspección hasta la ayer por la mañana.
Según la Policía, los cuerpos estaban atados de pies y manos; pero las autoridades no lograron determinar si tenían tatuajes o alguna característica que haga suponer que pertenecían a algún grupo de pandillas.