Católicos inician el tiempo de Pascua

Simultáneamente millones de fieles de todo el mundo participaron de la Vigilia Pascual, la  cual recuerda la resurrección de Cristo

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El fuego bendecido en el lucernario

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26 March 2016

Luego de las actividades de la Semana Santa, fieles capitalinos  esperaron con ansias las seis de la tarde de ayer para congregarse en la fachada de la Catedral Metropolitana del Divino Salvador del Mundo, en el Centro Histórico de San Salvador, para ser parte de la Vigilia Pascual.


Candelaria González fue una de ellas, quien aseguró que llegar desde Soyapango no es ningún sacrificio, ya que “es necesarios ser parte de la Pascua de Jesús, por eso todos los años vengo con mi familia a participar de esta vigilia”, contó.


El rito del lucernario fue la puerta que abrió la celebración, el cual consistió en realizar un pequeña fogata de la que el sacerdote obtuvo  fuego para encender el cirio pascual.


El fuego bendecido en el lucernario simboliza la acción fecundante, purificadora e iluminadora de la fuerza de Cristo Resucitado.


El párroco, Héctor Figueroa, fue el encargado de encender las velas que llevaron los feligreses, luego inició la procesión.


“El fuego es algo que nos purifica, que es vital para nuestras vidas, pero no es fuego cualquiera, si no un fuego necesario que nos borra los pecados”, puntualizó el religioso.

Vea galería de fotos desde móvil en este linkVigilia pascual, el fuego que purifica


Al llegar al templo, que está a oscuras, los católicos lo iluminaron con la luz de las velas. Cuando todos han entrado enciende las lámparas y se canta a una sola voz el Pregón Pascual.


“Exulten por fin los coros de los ángeles, exulten las jerarquías del cielo, y por la victoria de Rey tan poderoso que las trompetas anuncien la salvación”, entonaron los presentes.


Gregorio  Lozano, quien llegó desde Ciudad Delgado, aseguró que “la vigilia es el momento perfecto para celebrar con Jesús, ya que luego de vivir con Él toda la Semana Santa, no podemos quedarnos sin conocer su resurrección y ser parte de esta actividad religiosa”, comentó.


La misa de la Vigilia Pascual  tiene dos partes centrales: la  Liturgia de la Palabra, la que es diferente porque las lecturas son más numerosas (nueve, en vez de las dos o tres habituales).


La segunda parte es el Sacramento. Figueroa reflexionó que  después del camino cuaresmal y del catecumenado, se celebran, antes de la Eucaristía, los sacramentos de la iniciación cristiana: el Bautismo y la Confirmación.


La cita bíblica que representa la Pascua para los católicos es lo que escribió San Pablo en la primera carta a los Corintios 15, 14: “si Cristo no hubiera resucitado, vana seria nuestra fe”.


“Ahora los católicos vivimos un júbilo particular, ya que luego que recorrimos la Pasión de Jesús hoy celebramos su resurrección y 50 días después recibiremos al Espíritu Santo, quien es dador de vida y esperanza”, explicó el párroco.


El tiempo pascual es el periodo  más fuerte de todo el año, que se inaugura en la Vigilia Pascual y se celebra durante siete semanas hasta Pentecostés.


El Penteconstés es una festividad universal de la Iglesia Católica, mediante la cual se conmemora el descendimiento del Espíritu Santo sobre todos los Apóstoles, y se da a los cincuenta días después de la Resurrección de Jesucristo.