Dos hombres, entre ellos un menor de edad, fueron asesinados la tarde de este lunes en la colonia Santa Emilia, en Quezaltepeque, a eso de las 3:00 de la tarde.
Las víctimas fueron identificadas como Francisco V., de 15 años, y Rubén de Jesús Cortez, de 45.
Los cuerpos quedaron retirados a aproximadamente 100 metros uno del otro, debido a que Francisco intentó huir de los sujetos que los interceptaron al final del pasaje D de la colonia, en calle conocida como La Ceiba La Chin, y quedó tendido en el pasaje C, informaron las autoridades.
De acuerdo con la madre del menor, este tenía un mes de laborar como albañil con Cortez, su vecino que le había contratado y a quien describió como buena persona.
El año pasado Francisco había terminado noveno grado y se dedicaría a trabajar porque no fue aceptado en el colegio debido a las notas, agregó la señora.
Cuando fueron ultimados, ellos regresaban de la residencial Santa Emilia -cerca de donde fueron atacados-, ya que estaban construyendo una cochera.
La construcción estaba a cargo de Francisco, Cortez y su hijo, quien ayer no asistió a trabajar.
La señora afirmó que Francisco era hijo único y que nunca le contó sobre amenazas o problemas con otras personas, pero sí le había comentado que siempre que iban a trabajar veía a sujetos con apariencia de pandilleros que se conducían en carros.
También, mencionó que abandonaba su casa para ir al trabajo a las siete y volvía hasta que anochecía, todo el trayecto de ida y vuelta hasta el lugar donde laboraban lo hacían caminando. La esposa de Cortez era quien le ponía el desayuno y el almuerzo.
Las autoridades no descartan que el móvil del crimen esté relacionado a que las víctimas vivían en la colonia La Esperanza, dominada por la MS, y para llegar hasta donde trabajaban tenían que atravesar una zona con presencia de la pandilla 18.
La Policía montó un operativo en el cual fueron capturados tres presuntos pandilleros sospechosos del doble homicidio. A ellos les incautaron dos pistolas 9 mm.